La noche del 13 de noviembre de 2015 varios terroristas suicidas siembran el terror en París al perpetrar varios ataques. Hay varios tiroteos en restaurantes de la capital gala  y una explosión cerca del Stade France, donde en esos momentos se juega un Francia - Alemania.

La sala de conciertos Bataclan es el lugar donde la tragedia es más grande puesto que varios individuos entran y disparan indiscriminadamente hacia la multitud que presenciaba un concierto de una banda de rock. Los atacantes toman rehenes hasta que horas más tarde la policía asalta la sala y acaba con el secuestro. 

La dramática noche termina con 137 muertos y más de 400 heridos. La organización yihadista Estado Islámico reivindica los ataques.