La misión imposible

¿Cómo se le gana una final de Champions al Real Madrid?

El Real Madrid es el equipo que ha disputado más finales de la Copa de Europa (1955-1992) y de la Champions League, competición que adoptó este nombre a partir de la temporada 1992-93. El equipo blanco suma 17 últimas citas, de las que ganó 14 (6 Copas de Europa y 8 Champions League). Las tres derrotas las cosechó en la Copa de Europa, por lo que bajo la nomenclatura de Champions su dominio es incontestable: ocho finales, ocho títulos. Por otra parte, es el único equipo que ha encadenado cinco campeonatos consecutivos (los cinco primeros).

Ganar al Real Madrid una final de la máxima competición continental fue misión imposible durante un tiempo. Su superioridad, así como una elevada dosis de fortuna, era notoria, aunque también es verdad que en ocasiones se vio favorecido por algunas decisiones arbitrales. Ni ofreciendo los rivales sus mejores versiones, como el Milan en 1958, fueron capaces de acabar con el dominio blanco.

El Benfica fue el primer club capaz de derrotar al Real Madrid en una final

El Benfica fue el primer club capaz de derrotar al Real Madrid en una final

Solo tres equipos fueron capaces de dejar al Real Madrid sin el título: Benfica (1962), Inter de Milán (1964) y Liverpool (1981). El conjunto portugués obro el ‘milagro’ de dar la vuelta a un 0-2 y aliarse con la diosa fortuna en momentos puntuales. El cuadro italiano, por su parte, contó con el factor suerte a su favor, en forma de fallos defensivos del Madrid, mientras que los ingleses, últimos en doblegar al equipo blanco, además de sostener una sólida defensa a lo largo de toda la final, supieron aprovechar un error en la zaga española para asestar un golpe definitivo al Madrid.

13.06.1956: Parque de los Príncipes (París)

El Real Madrid saboreó su primer trofeo derrotando en la final al Stade Reims por 4-3. Había dejado en la cuneta al Servette, Partizán Belgrado y Milan. Era el equipo de los Di Stéfano, Gento, Marquitos, Rial, Miguel Muñoz, Zárraga... El Madrid levantó un 0-2 y un 2-3 para imponerse en la recta final del partido. Anotaron Di Stéfano, Héctor Rial (2) y Marquitos Alonso. Villalonga, entrenador del Real Madrid, reconoció que "con el 2-3 pensé que se nos escapaba la copa".

30.05.1957: Santiago Bernabéu (Madrid)

El segundo título lo cosechó el Madrid después de ganar en casa a la Fiorentina (2-0) con goles de Di Stéfano (de penalti) y Gento en la segunda parte. En el camino hacia la final superó al Rapid Viena, Niza y Manchester United. La prensa madrileña aseguró, en portada, que el primer gol, logrado de penalti por Di Stéfano, "estuvo precedido por un dudoso offside de Mateos". Bernardini, entrenador de la Fiorentina, tenía la mosca detrás de la oreja en la jugada que abrió el marcador y en rueda de prensa habló de "un importante fallo arbitral".

28.05.1958: Heysel (Bruselas)

El equipo blanco se impuso al Milan (que llevó ventaja en el marcador dos veces) en la prórroga (3-2) con goles de Di Stéfano, Rial y Gento. Los tantos del Milan de Gipo Vinai fueron obra del uruguayo Schiaffino y del argentino Ernesto Grillo. Los pupilos de Luis Carniglia dejaron en la cuneta al Royal Amberes, Sevilla y Vasas de Budapest.

03.06.1959: Neckarstadion (Stuttgart)

Cuarto título para el Real Madrid. En esta ocasión, después de derrotar nuevamente al Stade de Reims (2-0). Para llegar a la final apeó al Besiktas, Wiener y Atlético de Madrid. El equipo de Carniglia encarriló la final en el minuto inicial con un gol de Mateos. Di Stéfano, en los primeros compases del segundo tiempo, sentenció el choque. Nada pudo hacer el portero Colonna, tapado por sus defensas. El Madrid, por mediación de Mateos, desperdició un penalti.

18.05.1960: Hampden Park (Glasgow)

Quinto título consecutivo del Real Madrid, que se deshizo en la final del Eintrach Frankfurt por un contundente 7-3, obra de Di Stéfano (3) y Puskás (4, uno de penalti). El equipo alemán se puso 0-1 pero el Madrid volteó el marcador en solo tres minutos. El equipo blanco superó al Jeunesse d’Esch, Niza y FC Barcelona en su camino hacia Glasgow. El 4-1, obra de Puskás, de penalti, fue un 'regalo' del juez escocés Jack Mowat. Dijo la prensa española al respecto: "(...) dicha falta en el estándar del fútbol, no ya el español, sino latino, jamás hubiera dado origen a semejante sanción".

02.05.1962: Olímpico (Ámsterdam)

Primera final perdida por el Real Madrid. El equipo merengue, que empezó ganando 0-2, se vio superado por el Benfica por 5-3. Los goles del equipo luso llevaron la firma de José Águas, Cavém, Coluna y Eusébio (doblete). Los del Madrid los anotó Puskás (hat-trick). El equipo de Miguel Muñoz se quejó del penalti que puso al Benfica por delante en el marcador y protestó uno que, a su juicio, los portugueses cometieron sobre Di Stéfano. Al Madrid le lastró la lesión de Casado (sufrió un tirón), un remate de Tejada al larguero y el comentado penalti no señalado sobre Di Stéfano.

27.05.1964: Prater (Viena)

Dos años después de perder la primera final, el Madrid perdió la segunda, ahora ante el Inter de Milán (3-1), que anotó por mediación de Mazzola (2) y Milani. El gol madridista fue obra de Felo. El equipo de Miguel Muñoz dejó en el camino al Dinamo Bucarest, Milan y Zúrich. El pentacampeón cometió fallos defensivos de bulto y el Inter sacó el máximo rendimiento de ellos. El técnico madridista habló de "regalos", el presidente Bernabéu de que "el factor suerte decidió" y los jugadores, como Di Stéfano, siguieron la misma dirección que el mandamás blanco: "Cuando la suerte está de espaldas, no hay nada que hacer".

11.05.1966: Heysel (Bruselas)

El Real Madrid volvió a saborear la victoria en una final de la Copa de Europa después de dos derrotas consecutivas. En esta ocasión derrotó al Partizán Belgrado (2-1) con goles de Amancio y Serena, que remontaron el tanto inicial del equipo balcánico, obra de Vasovic. Para llegar a la final el Madrid se deshizo del Feyenoord, Kilmarnock, Anderlecht y el Inter de Milán. Miguel Muñoz aseguró al final del partido que su equipo salió con "muchos nervios", serenándose en el segundo tiempo..

27.05.1981: Parque de los Príncipes (París)

Tercera y última final perdida por el Real Madrid. El equipo blanco, que llegó a la cita después de apear al Limerick, Honved, Spartak Moscú e Inter de Milán, no pudo con el Liverpool. Un solitario gol de Alan Kennedy en el minuto 82 decidió el choque. El jugador del Liverpool no desaprovechó un regalo de García Cortés para batir al meta Agustín y sentenciar la final. Era el Madrid de Camacho, Del Bosque, Stielike, Juanito, Santillana y los ‘Garcías’ (Cortés, Navajas...). Al final del choque, resignación en el equipo madridista.

20.05.1998: Ámsterdam Arena (Ámsterdam)

El equipo madridista volvió a lo más alto después de 32 años. Ganó su primera Champions con una acción dudosa. ¿El gol de Mijatovic fue logrado en fuera de juego? La jugada se inició con un disparo de Roberto Carlos y, entonces, Mijatovic, estaba en posición antirreglamentaria. El balón acabó llegándole tras un rebote de un defensa, pero inicialmente su posición dejó muchas dudas... De nada sirvieron las protestas de la ‘Vecchia Signora’, que se libró de la expulsión de Davids en otro momento del partido. Para llegar a la última cita el Madrid eliminó al Rosenborg, Olympiacos y Porto (en la liguilla) y al Bayer Leverkusen y Borussia Dortmud en los partidos a ida y vuelta.

24.05.2000: Stade de France (Saint-Denis)

El Madrid no falló y sumó un nuevo título, ahora a costa del Valencia, equipo al que superó por 3-0 con goles de Morientes (en el primer tiempo) y McManaman y Raúl (en el segundo). El equipo de Del Bosque fue superior al de Héctor Cúper, que jugó siempre con unos nervios excesivos. Para llegar a la final el Madrid fue superior al Porto, Olympiacos y Molde (en la primera liguilla) y en la segunda pasó como segundo por detrás del Bayern Múnich, superando al Dinamo de Kiev y al Rosenborg. En las eliminatorias dejó en la cuneta al Manchester United (que le anularon un gol a Yorke en la ida y no le cobraron un claro penalti en la vuelta por unas manos de Karanka) y Bayern Múnich.

15.05.2002: Hampden Park (Glasgow)

El Real Madrid sumó su noveno título tras derrotar en la final al Bayer Leverkusen (2-1). Los goles blancos fueron obra de Raúl y Zidane (marcó un golazo) y el del equipo alemán, del brasileño Lúcio (el 1-1). El portero Casillas también tuvo su cuota de protagonismo. Salió en el minuto 67 por la lesión de César y, con sus paradas, fue decisivo en la victoria de su equipo. Para llegar a la final el Madrid eliminó a la Roma, Lokomotiv Moscú y Anderlecht (primera liguilla), Panathinaikos, Sparta Praga y Porto (segunda liguilla) y Bayern Múnich y FC Barcelona en las eliminatorias.

24.05.2014: Da Luz (Lisboa)

En la prórroga, el Real Madrid acabó con la resistencia del Atlético de Madrid (4-1). El duelo finalizó con empate a uno: Godín (36') y Sergio Ramos (90+3'). El tanto del defensa madridista vino precedido por una falta de Bale a Juanfran dentro del área que no quiso ver el neerlandés Kuipers. En el tiempo extra los jugadores de Ancelotti sentenciaron gracias a Bale, Marcelo y Cristiano Ronaldo (de penalti). Para llegar a la final el Madrid lideró la liguilla ante el Galatasaray, Juventus y Copenhague y, en las eliminatorias, doblegó al Schalke 04, Borussia Dortmund y Bayern Múnich.

28.05.2016: Giuseppe Meazza (Milán)

Otra vez campeón el Real Madrid a costa del Atlético (1-1). En esta ocasión, en la tanda de penaltis (5-3). Marcaron Sergio Ramos (15') y Yannick Carrasco (79'). La prórroga no resolvió nada y la victoria blanca se cocinó desde los 11 metros. El Madrid convirtió todos los penaltis (Lucas Vázquez, Marcelo, Bale, Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo) y el Atlético, tras anotar los tres primeros (Griezmann, Gabi y Saúl), erró el cuarto (Juanfran). Lo cierto es que al Madrid le sonrió la suerte en la conquista de la undécima, pero también contó con ciertas ayudas arbitrales a cargo de Mark Clattenburg: Sergio Ramos marcó en fuera de juego y, tiempo después, el árbitro lo reconoció públicamente a la prensa inglesa. El gol que subió al marcador fue ilegal. Tampoco vio unas manos de Sergio Ramos dentro del área tras un centro de Griezmann...

03.06.2017: Millenium (Cardiff)

El Real Madrid sumó su 12ª Champions después de superar en la final a la Juventus por 4-1, con goles de Cristiano Ronaldo (doblete), Casemiro y Asensio. El tanto de la ‘Vecchia Signora’ lo materializó Mandzukic. El equipo de Zidane fue muy superior al de Massimiliano Allegri. En el camino hacia la final el conjunto blanco superó la liguilla (como segundo) contra el Borussia Dortmund, Legia Varsovia y Sporting Lisboa y, en las eliminatorias, se deshizo del Nápoles, Bayern Múnich (con escándalo al no ver Casemiro la segunda amarilla tras un derribo a Robben y cortar un balón con la mano dentro del área; a Lewandowski le pitaron un fuera de juego surrealista después de estar habilitado por Marcelo y los dos goles de CR7 llegaron precedidos por sendos fueras de juego) y Atlético de Madrid.

26.05.2018: Olímpico (Kiev)

El Real Madrid dejó sin título al Liverpool (3-1) gracias a los goles de Benzema (tras aprovechar un regalo del meta Karius) y Bale (doblete). El tanto inglés fue obra de Sané. El camino del Madrid para llegar a la final fue: segundo en la liguilla (con Tottenham, Borussia Dortmund y APOEL), PSG, Juventus y Bayern Múnich. En esta edición los árbitros echaron otra manita al Madrid al no pitar fuera de juego de Kroos en la jugada previa al penalti de Lo Celso en el Madrid-PSG y tampoco vieron las manos de Sergio Ramos tras un centro de Rabiot, no teniéndolas pegadas en el cuerpo... Contra la Juve el árbitro pitó un polémico penalti de Benatia a Lucas Vázquez en el tiempo agregado, un hecho que encendió al meta Buffon tras el partido: "Si pitas un penalti así en el minuto 93 no eres un hombre, eres un ‘killer’, un animal. En vez de corazón tienes un cubo de basura". Y contra el Bayern, más polémica: a Lewandowski no le pitaron tres penaltis en la ida (dos de Carvajal y uno de Varane) y, en la vuelta, en Madrid, tampoco le pitaron otro (de Sergio Ramos por una plancha). Marcelo interceptó un balón con las manos despegadas del cuerpo un centro de Kimmich, otro penalti que se fue al limbo.

28.05.2022: Stade de France (Saint-Denis)

El título número 14 llegó, otra vez, a costa del Liverpool (0-1, gol de Vinicius en la segunda parte). El Madrid llegó a la última cita tras superar al Inter de Milán, Sheriff Tiráspol y Shakhtar Donetsk en la liguilla, y al PSG, Chelsea y Manchester City, perjudicado por la dureza de Casemiro, que debió dejar el terreno de juego en el primer tiempo por dos feas entradas: la primera por derribar a De Bruyne por detrás y, la segunda, por frenar a Foden agarrándolo de la camiseta. Dos acciones que a juicio del árbitro no fueron merecedoras ni de tarjeta amarilla...

Hay que retroceder a 1981 para hablar de la última final de Copa de Europa perdida por el Real Madrid. El conjunto blanco cayó ante el Liverpool gracias al solitario gol de Kennedy y, desde entonces, no sabe lo que es perder una final.

Han pasado 43 años desde ese momento y los blancos han ganado desde ese día las ocho finales disputadas. ¿Qué pasará este 2024 en Wembley?

En SPORT hacemos el ejercicio de recordar cómo ha cambiado el mundo desde entonces. ¿Cómo era la vida en 1981?

Las bazas del BVB

Las cuatro claves

Si algo evidencian estos datos del Real Madrid es que en la Champions se compite distinto que en la competición doméstica. Hay factores que cobran un peso incalculable que los blancos dominan a la perfección. Uno de ellos, la efectividad. En este aspecto, es completamente esencial que el Borussia Dortmund mantenga la eficiencia alemana que mostró ante el PSG en las semifinales.

A la ‘magia’ del Real Madrid en la competición reina solo se le puede responder con constancia, trabajo y esfuerzo. Eso lo tiene el equipo de Edin Terzić. Con un 4-2-3-1 muy marcado, con Can y Sabitzer en la base de la medular, el cuadro de Dortmund mantiene una intensidad muy elevada durante los noventa minutos. Todos corren, todos ayudan, todos se ofrecen. Desde el primero al último. Juegan como un bloque, y si este se parte contra los de Ancelotti, no tendrán nada que hacer.

No hay otro camino que este, el que los ha llevado a Wembley. El motivo por el que los jugadores de buen pie pueda brillar, como Jadon Sancho, Julian Brandt, Marco Reus (cuando entra desde el banquillo) o Marcel Sabitzer, entre otros, es por el intachable trabajo colectivo que hace todo el equipo. Y como pasó en el Parque de los Príncipes, sacar rédito de las acciones a balón parado, que como es bien sabido por todos, pueden igualar cualquier diferencia en un abrir y cerrar de ojos. Finalmente, el Borussia tendrá que disfrutar sufriendo. Contra el Madrid no vale con saber sufrir, hay que estar a gusto con ello, ser consciente de que habrá minutos infernales y ser capaz de mantener una mentalidad positiva. El resto lo dictará el césped.

El muro amarillo

Gregor Kobel

Todo equipo que aspira a ganar la Champions necesita un portero de primer nivel. Terzić lo tiene. De hecho, Gregor Kobel era el mejor portero de las semifinales. Y no es una opinión, así lo reflejaban los datos. Para empezar, el Dortmund es el equipo de todo el torneo que ha evitado que más balones que iban a puerta acabasen en gol, un 86,8% de los mismos, para ser exactos. Prueba de ello, y con la ayuda de los palos, no encajaron ni un gol en 180 minutos contra el PSG.

En lo que apela directamente al portero suizo, algo infravalorado por el público general, es el que más paradas ha hecho en toda la competición (41). Para ponerlo en contexto, Lunin suma 30. Sin embargo, hay una estadística que manda por encima de todas. ¿Cuántos goles debería de haber encajado realmente? Hasta la fecha, ha recibido ocho goles, pero según los ‘expected goals’ (goles esperados) debería de haber recogido el balón de su red 15 veces. Es decir, ha evitado siete goles en contra. Con mucha diferencia, el mejor de toda la competición. Su nivel será crucial en Wembley.

Como el buen vino

Mats Hummels

Una de las grandes dudas del Dortmund en las semifinales era el nivel defensivo. Mats Hummels (con la colaboración de Schlotterbeck) se encargó de despejar todas las dudas. Como el buen vino, el central de 35 años demuestra que el tiempo juega a su favor. MVP de la ida al secar a Mbappé, MVP de la vuelta al marcar el gol del triunfo en el Parque de los Príncipes, el ‘15’ del cuadro alemán está dispuesto a quitarse en Wembley la espina que se le clavó en la final de 2013.

Sin llevar el brazalete (lo lleva Can o Reus cuando juega) es el líder del equipo. El que manda en la zaga, el que ordena al equipo y el que sube el ánimo cuando está algo bajo. Si el test de Mbappé no era fácil, ahora tendrá que hacer frente a un tridente muy ‘venenoso’, especialmente en el sector derecho, perfil que ocupa en el centro de la zaga, donde deberá de ayudar constantemente a Ryerson a frenar a Vinicius, si es que Ancelotti no le coloca en zonas interiores.

Del mismo modo que Kobel, su papel en Wembley será clave para dibujar las opciones que tendrán los de Terzić de tocar metal el próximo 1 de junio. Con menos posibilidades físicas que hace una década, Hummels enaltece su inteligencia para estar siempre bien colocado, aseado con balón y siempre atento para ir al corte, es un central que puede marcar las diferencias.

Cedidos superstar

Jadon Sancho & Ian Maatsen

Dicen que los cedidos (cuando salen bien) representan un amor de verano muy intenso. Llegan, se meten en el corazón de todos los aficionados del equipo, y después se van para nunca volver a saber de ellos. En el caso de Ian Maatsen y Jadon Sancho es distinto, ambos quieren permanecer para siempre en la historia del Borussia Dortmund. Quién sabe si también en la plantilla.

El primero llegó procedente del Chelsea y se ha convertido en dueño y señor del carril izquierdo. Un futbolista total que hace de todo. Ataca, defiende, con buen pie… Lo tiene todo para triunfar en la élite. En mayo de 2023 ganó la Championship con el Burnley. En enero de 2024 llegó cedido al Dortmund. Ahora está en la final de la Champions. Completamente impresionante. Ah, por cierto. Si pudo hacerle frente a Dembélé, uno de los extremos más desequilibrantes del planeta, puede cumplir ante cualquiera.

Y todo ‘amor’ necesita ser correspondido. En el Borussia Dortmund, el otro cedido que enamora al 'Yellow Wall’ es Jadon Sancho. El niño pródigo que brilló en el Signal Iduna Park y que tuvo que darse cuenta de que fuera de casa hace mucho frío para volver. A punto de ser apagado en el Manchester United, el equipo alemán lo rescató en enero y ha vuelto a sonreír.

Con confianza y el calor de su gente, Sancho vuelve a ser Sancho. Habilidoso, atrevido, ‘malvado’ y con mucho peligro. Nunca perdió el desequilibrio, en Old Trafford solo perdió las ganas. 12 regates en la ida contra el PSG, el récord de la Champions desde que un tal Leo Messi firmase 16 en el año 2008, contra el Manchester United. ¿Hace falta decir algo más? Si el inglés está 'juguetón' en Wembley, su Inglaterra natal, el Madrid sufrirá. Especialmente Ferland Mendy, su pareja de baile, salvo sorpresa. Si no, que le pregunte a Nuno Mendes qué tal fue la experiencia.

'9' de la vieja escuela

Niclas Füllkrug

Todo equipo necesita a un ‘currante’ de verdad, un futbolista de esos que se lo pasan bien en el ‘barro’, de los de antes. Niclas Füllkrug es un nueve de la vieja escuela, en peligro de extinción, por cierto. No es el más aseado con el balón en los pies. ¿Lo necesita? Evidentemente que no. Terzić le pide que trabaje, se ‘pelee’, luche todos los balones, los descargue y de aire a su equipo. Y que meta goles.

El alemán hace exactamente esto en su debut en Champions, a los 31 años, por cierto. Ha demostrado que nunca es tarde para brillar, y quiere hacerlo en Wembley. Ante el PSG se comió a Lucas Beraldo, que pagó la ‘novatada’ en su primer año en Europa. Pero contra el Madrid toca Antonio Rüdiger, uno de los pocos centrales en el mundo que es capaz de anular a Erling Haaland, y que también se lo pasa muy bien explotando el ‘otro fútbol’. Será un duelo espectacular.

Lo cierto es que la vida de Füllkrug ha cambiado radicalmente en cosa de año y medio. En el verano de 2022, con 28 años y tras una discreta carrera entre Primera y Segunda División, ascendió con el Werder Bremen a Bundesliga. Se ganó participar en el Mundial de Qatar y acabó el curso como máximo goleador de la competición doméstica con 16 tantos (los mismos que Christopher Nkunku, en aquel entonces en el RB Leipzig). Ahora, está a un partido de ganar la Champions en una campaña en la que suma 16 goles y 10 asistencias. ¿Será determinante en Wembley?