¡Garbiñe Muguruza, inmensa, vuelve a la final de Wimbledon!

Garbiñe Muguruza vuelve, dos años después, a la final de Wimbledon. La tenista caraqueña estuvo inmensa en su semifinal ante la eslovaca Magdalena Rybarikova, la sensación del torneo, a la que derrotó por 6-1 y 6-1 en 64 minutos. Y es que con la llegada de la hierba londinense, está ofreciendo su mejor versión de la temporada.

Rybarikova se veía superada por las circunstancias (era su primera semifinal de Grand Slam) y por una rival mucho más decidida, más valiente, dispuesta a arriesgar al máximo pero eligiendo en cada momento la mejor opción.

Garbiñe tenía una misión: alcanzar su primera final de la temporada, la tercera de Grand Slam y segunda en Wimbledon, y nada ni nadie iba a apartarla de ese propósito. Mucho menos cuando tu rival no entra en el partido hasta el segundo parcial y cuando está ya con el agua al cuello. Pero es que todo lo que intentaba Muguruza le salía.

En el juego de fondo de pista, con golpes profundos y ajustados a las líneas (22 'winners por sólo ocho de su rival), desplazó de su zona de confort a la eslovaca. Y, cuando subió a la red, Garbiñe también lo hizo con altísimas garantías de éxito (ganó 19 de los 25 puntos que allí disputó).

Mucho se tenían que torcer las cosas para que el triunfo se le escapara a la tenista hispano venezolana. No daba ni un solo respiro al partido, al que imprimió un ritmo y una intensidad altísimos... que no redujo en ningún momento. 

Garbiñe iguala las dos finales que disputó Arantxa Sánchez Vicario (1995 y 1996) y se queda a una del récord para el tenis femenino español en Wimbledon que estableció Lilí Álvarez en los años 20 (1926-28).

Espera rival: la vencedora del duelo entre la estadounidense Venus Williams, pentacampeona en Wimbledon, y la británica Johanna Konta, ídolo local.  

"Era un partido trampa, ella tiene mucho talento pero yo he entrado con confianza y todo ha salido bien. Estaba mucho más preparada que la otra vez que jugué semifinales aquí. Estoy jugando bien y quiero seguir haciéndolo en el último partido", destacó Garbiñe a los micrófonos de la BBC.

"Estar en una final de Grand Slam es un gran logro y no me importa quién sea la rival, quiero seguir a este nivel y disfrutarla", añadió, antes de destacar la ayuda de su entrenadora en este Wimbledon, la única campeona española en la hierba londinense (1994), Conchita Martínez. "Ella ya ha ganado aquí, yo no lo hecho. Me ha estado ayudando con sus consejos y seguro que también lo hará ahora", cerró Muguruza.