La generación ‘Baby’ brilla en los Pirineos

Juan Ayuso (19 años) cruza la meta de La Molina en segunda posición

El ganador de etapa fue el australiano Ben O'Connor

Juan Ayuso, como mejor joven en el podio

Juan Ayuso, como mejor joven en el podio / EFE

Sergi López-Egea

Sergi López-Egea

Son la generación 'Baby'. Son el futuro. Son la sonrisa de este deporte. Son los ciclistas que corren la Volta para aprender, pero, a la vez, para intentar ganar. Son los que observan que el viento sopla de cara y que es una locura atacar desde muy lejos, pues el esfuerzo es tan grande que no merece la pena para sacar unos solos segundos en La Molina.

Y es el tiempo de Juan Ayuso, segundo en la meta, en una Volta abierta, que este jueves vivirá su etapa reina, y donde un australiano que ganó en Tignes, en el Tour del año pasado, Ben O’Connor, otro más que vive en Andorra, se anota el triunfo y se viste de líder.

Los jóvenes se dejan ver en una Volta castigada por un virus, que no es el covid, pero que está dejando a un montón de corredores fuera de control, tal cual sucedió en la París-Niza, malestar general, vómitos y tripas revueltas. Ayuso, que ganó el Giro de las promesas, o Carlos Rodríguez, al que se le escapó el Tour del Porvenir por 7 segundos, ruedan en la cabeza del pelotón.

El primero, un alicantino nacido en Barcelona hace 19 años, tiene a su servicio al potente Emirates, un equipo que siempre quiere más aunque no esté Tadej Pogacar en acción. Y el segundo, un granadino de Almuñécar, que estudia ingeniería y al que el Ineos ha elegido como el jefe en la Volta después de perder a Richie Porte y Michael Kwiatkowski por enfermedad.

Y por enfermedad también se va a casa Tom Dumoulin y se queda descolgado Simon Yates. No solo se lucha contra los elementos, sino contra los virus. Los elementos vienen marcados por el viento que hace que se desluzca la primera de las dos citas con los Pirineos pues son demasiados los corredores que llegan en el pelotón principal, cuyo esprint gana Ayuso a apenas seis segundos de O’Connor. Ha habido tres etapas de Volta y las tres han sido ganadas por ciclistas australianos, aunque, como muchos de ellos viven en Andorra o en Girona, se conocen bien las carreteras catalanas.

RESIDENTE EN ANDORRA

Ayuso también se conoce la zona. Lleva ya varios meses residiendo en Andorra. Se le recuerda hace un par de semanas subiendo hacia Envalira en plena tormenta, con agua, nieve y sobre todo frío. Corre, como Rodríguez, con el futuro del ciclismo español en sus pedales. Ya lo han demostrado antes. Son rápidos en las llegadas, son inquietos, buenos escaladores y, además, se defienden en las contrarrelojes, ¿qué más se puede pedir? Porque ambos estarán decididos este jueves a volver a ser protagonistas en la subida final a Boí-Taüll, que aunque no es el Tourmalet, es mucho más dura que la ascensión a La Molina, sin grandes desniveles y con zonas de descenso para recuperar.

No se cansa Ayuso cuando O’Connor, a cinco kilómetros de la meta, ya ha atacado. Mueve el árbol de la Volta. Muestra su carácter aguerrido. Y solo tiene 19 años, prueba de que ahora, al contrario de lo que sucedía hace años, no hay que envolver a estos chavales y tenerlos escondidos para hacerlos debutar en el Tour cuando ya casi han formado una familia. Hay que darles libertad y que sigan los pasos, el ejemplo, de los Pogacar o Remco Evenepoel. Porque de ellos será el reino del ciclismo y porque Ayuso o Rodríguez, aunque con segundos perdidos, ya están en la senda de poder luchar por ganar la Volta.