El US Open no pierde la esperanza

El US Open aguantará hasta el último momento

El US Open aguantará hasta el último momento / AFP.

David Boti

David Boti

El US Open sigue enviando señales difusas sobre su plan de acción en este 2020. Hace unas horas, la organización del cuarto 'Grand Slam' emitió un comunicado en el que volvió a reiterar su firme apuesta por llevar a cabo el evento neoyorquino en las fechas programadas y con público en las gradas del USTA Billie Jean King National Tennis Center. 

Un recinto que, a día de hoy, sigue siendo un hospital de campaña y también un centro logístico para el reparto de comida a los más afectados por la pandemia del coronavirus en Estados Unidos, el país con más víctimas mortales a causa del COVID-19.

"El objetivo de la USTA es celebrar el US Open de 2020 en Nueva York en sus fechas programadas y con público", admite el comunicado. El torneo está previsto que se inicie el 24 de agosto siendo el 13 de septiembre el último día de competición.

Además de su firme convicción en la realización del Major norteamericano, el torneo reconoce que la situación es "incierta y cambia rápidamente" y por ello está barajando otros escenarios. Eso sí, en el mismo comunicado descartan un cambio de sede como se venía especulando en los últimos días en los que se hablaba de un posible traslado al recinto de Indian Wells.

"Es un tema que genera mucha especulación, pero nos gustaría aclarar que aunque estemos estudiando muchas variables para el US Open, la opción de cambiar la sede o la fecha no está sobre la mesa ahora mismo", apunta la nota.

LA DECISIÓN FINAL

Además, la propia Asociación Estadounidense de Tenis (USTA) asegura que trabaja diariamente junto a las autoridades sanitarias y también se pone una fecha límite. El organizador del US Open afirma ya que tomarán una decisión definitiva acerca del futuro de la edición de este año a mediados de junio

Respecto a sus 'hermanos', Wimbledon fue cancelado y Roland Garros aplazó el evento para mediados del mes de septiembre. El Abierto de Australia estudia aplazar también su próxima edición si no se dan las garantías necesarias.