Alemania pasa por su peor racha de la historia

Nil Congost

Con la derrota de ayer frente a Francia por 2-1 ya son 6 los partidos que la selección alemana ha perdido en este curso. Un nuevo récord de derrotas que supera el registro de Franz Beckenbauer cuando estuvo al frente del combinado alemán, que en el año 1985 perdió cinco partidos.

2018 ha sido una pesadilla para Alemania. De los 11 partidos que ha disputado, solo ha salido vencedor en 3 ocasiones. Ha empatado 2 y ha perdido en los 6 restantes, unos resultados sin precedentes hasta la fecha de hoy que hacen peligrar la continuidad de Joachim Löw.

Más allá de los resultados, el proyecto de Löw vislumbra incerteza. La máquina alemana, en su intento de rejuvenecerse, se ha quedado atascada. Ni los engranajes fluyen ni parece que tenga la determinación de antaño. El registro goleador de la Mannschaft ha sido muy pobre. En 11 partidos solo ha conseguido marcar  9 goles, dejando el casillero en blanco hasta en 5 ocasiones. Un hecho culturalmente insólito en Alemania, que siempre ha destacado por su registro goleador con históricos delanteros como Gerhard Müller o Miroslav Klose, el máximo goleador de la historia de los Mundiales.

Defensivamente los registros son igual de malos. Alemania solo ha conseguido acabar con la portería a cero en un partido contra Francia que tampoco pudo ganar. Unos números que no se daban desde hacía 54 años atrás.  

La preocupación con los resultados de la selección se agudizó con la derrota de Alemania por 3-0 contra Holanda, donde la selección mostró una versión muy pobre, sin apenas resistencia ni fuerzas para atacar. Con la última derrota contra Francia, el equipo se ha recompuesto y ha conseguido, por fin, ser reconocible al menos durante los 45 primeros minutos del encuentro. Unos atisbos de esperanza a los que se han aferrado los medios alemanes, que pese al récord negativo de resultados y el peligro latente de descender de la Nations League, siguen creyendo en el proyecto de Joachim Löw.