¿Pogacar puede perder el Tour?

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Pogacar, más líder del Tour

Pogacar, más líder del Tour / AFP

Sergi López-Egea

Sergi López-Egea

Tadej Pogacar, después de la que ha sido una de las primeras semanas más locas del Tour que se recuerdan, parece tener ya la victoria amarrada. Nadie puede seguirlo cuando ataca en la montaña y, además, es el mejor en contrarreloj. El equipo Emirates, que ofrecía alguna duda por su potencial, de momento lo ha protegido de forma correcta. Y cuando se ha encontrado solo ha atacado a unos rivales que, salvo Richard Carapaz y sin éxito, ni se han movido. 

El Emirates no parece tener la fortaleza del Sky en época de Chris Froome, ni tampoco del Us Postal, dopaje aparte, en tiempos de Lance Armstrong. Pogacar debe estar muy atento y posicionado en las etapas, mal llamadas de transición, programadas entre el jueves, en Nîmes, y el viernes y el sábado por los alrededores de Carcasona. Si aparece el viento, si su equipo falla, el ciclista esloveno puede tener un problema muy serio si se queda cortado. Asimismo debe estar pendiente de las escapadas, no sea que en una fuga se cuele algún contrincante que no figura en la nómina de aspirantes al podio.

La montaña parece controlada, aunque como afirma Pedro Delgado, vencedor en París (1988) y con otros dos podios, no puede ni siquiera pillar un resfriado en los Pirineos, porque si lo ven fastidiado lo atacarán. "El principal enemigo de Pogacar es él mismo. No puede relajarse ni un instante y, sobre todo, cuidar la salud. Parece tener el Tour ganado pero no debe descuidarse porque una desgracia lo apartaría del triunfo. Otros favoritos se han caído. Ese es el peligro", afirma Perico.

Enemigos o aliados

Por ahora, el Emirates no ha fallado. En un momento determinado, otras escuadras, léase Ineos o Jumbo, incluso el Movistar, pueden convertirse en aliados para controlar la carrera a la hora de ganar o conservar posiciones en la clasificación general. "Con lo loca que va la carrera, a ver si un ciclista de los que van de la décima posición para atrás se cuela en una fuga numerosa. De momento su equipo no le ha fallado", cuenta Óscar Pereiro, vencedor en 2006.

Joseba Beloki, con tres podios en París, piensa que solo una catástrofe le quitará el triunfo. "Estoy convencido de que volverá a sacar tiempo a todos en la montaña pero no está libre de sufrir un bajón físico. ¿Quizá Carapaz lo ataque? Por ahora los que luchan por el podio miran para otro lado cuando Pogacar demarra".

A Fernando Escartín, que fue tercero hace 22 años, le preocupa más la respuesta del Emirates en momentos claves que el comportamiento de Pogacar. "El dominio que ha hecho en la carrera es muy grande. Estamos ante un gran campeón que marcará una época. Pero debe cuidarse, sobre todo en las etapas de media montaña y evitar que el equipo le haga aguas". Hoy, por ejemplo, le aguarda una etapa llamada a decidirse con una fuga en Valence.