Rafa Nadal, todo por la tierra

El español quiere volver a reinar sobre la arcilla

El español quiere volver a reinar sobre la arcilla / EFE.

David Boti

David Boti

El descanso del guerrero. Rafa Nadal planifica, desde hace años, el calendario como nadie. Aconsejado por su entorno, el balear dosifica sus apariciones en el circuito para estirar el máximo posible su carrera deportiva. Quizá solo Roger Federer se aproxima a él en este sentido. El manacorí, que se plantó antes de las semifinales de Indian Wells ante el suizo, se da una tregua y en tierras californianas ya anunció sus intenciones de futuro. “Mi plan es jugar Monte Carlo, Barcelona, Madrid, Roma y Roland Garros. Este es mi plan. A partir de ahí veremos qué ocurre. Es el calendario que he hecho toda mi vida y espero completarlo un año más”, aseguró.

Como siempre, sus ganas y su optimismo le permiten seguir luchando por sus objetivos aunque su cuerpo le transmita, a veces, lo contrario. Su ausencia en el segundo Masters  1000 de la temporada en Miami le abre un periodo de casi un mes para recuperarse al 100% de la tendinitis que afecta a su rodilla derecha. Busca afrontar, en condiciones, la parte de la temporada en la que se mueve como pez en el agua. Tras visitarse con su médico de confianza, Ángel Ruiz Cotorro, el número dos del mundo ultima la transición de pista rápida a tierra batida, que no suele ser nada fácil para las articulaciones de los tenistas. 

UNA 'BESTIA' TERRÍCOLA

En una temporada marcada, de nuevo, por las lesiones (solo ha jugado 13 partidos en lo que llevamos de 2019), Nadal quiere volver a reinar en su territorio. Su porcentaje de victorias sobre polvo de ladrillo es descomunal (92%) y difícilmente igualable por cualquier otro tenista profesional: 415 victorias por 36 derrotas. Ni Federer (75%) ni Novak Djokovic (79%) se acercan a estos registros estratosféricos que avalan, una vez más, su dominio sobre superficies lentas como las del tercer ‘grande’ del año.  

Estas cifras tan clarividentes se han traducido en un total de 57 títulos, la gran mayoría de los que posee el español en sus vitrinas. Nadal inicia la gira más importante del año y está ‘obligado’ a defender su corona en Monte Carlo, Barcelona, Roma y Roland Garros, cuatro de las cinco paradas previstas en su calendario. O lo que es lo mismo, un montante de 4.500 puntos de su ranking. Además, hay que sumar los 180 puntos logrados en Madrid el pasado año tras su derrota en cuartos de final ante el austríaco Dominic Thiem, reciente campeón del Masters 1000 de Indian Wells. Ese fue su único tachón durante la pasada gira sobre el polvo de ladrillo. El resto, un total de 24 victorias. Una auténtica barbaridad.

ARRANCA EL 14 DE ABRIL

La cita monegasca dará el pistoletazo de salida a la temporada de arcilla de Rafa y el español ahí estará si la recuperación sigue los plazos previstos. Lo aseguró en rueda de prensa y es un hombre de palabra. Todo por la tierra. La superficie que le ha visto crecer y dominar toda una época en el tenis mundial.