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Tenis

Paolini guía a Italia a su tercera final consecutiva

La número 8 del ranking WTA sumó la victoria en su duelo individual y remató la eliminatoria imponiéndose en el dobles junto a la veterana Errani

Paolini y Errani celebran la victoria

Paolini y Errani celebran la victoria / AP

EFE

La selección italiana se clasificó por tercer año consecutivo para la final de la Copa Billie Jean King, liderada por una Jasmine Paolini que ejerció de líder para ganar los dos puntos decisivos de su equipo, en su partido individual y en el dobles.

Italia, ganadora del torneo en su pasada edición en Málaga (España) y finalista en Sevilla (España) en 2023, jugará la octava final de su historia este domingo ante el vencedor del Estados Unidos-Gran Bretaña del sábado.

Una clasificación conseguida tras la derrota de Elisabetta Cocciaretto ante Kostyuk (2-0), la victoria de Paolini contra Svitolina (2-1) y la de Jasmine Paolini-Sara Errani ante Marta Kostyuk y Lyudmyla Kichenok por 6-3 y 6-3 que cerró la primera semifinal con un 2-1 a favor de las transalpinas.

El equipo capitaneado por Tathiana Garbin demostró tener un carácter diferente al resto de selecciones, levantándose y remontando en los momentos más complicados.

Paolini, número ocho del mundo, mostró su resiliencia en un partido que tenía prácticamente perdido, con 6-4 y 4-2 abajo, con saque para Svitolina, pero al que le dio la vuelta con un tenis valiente y el apoyo de gran parte del público chino.

Golpe en el dobles

Errani, de 38 años y quinta mejor del mundo en el circuito de dobles, fue la dosis de experiencia que necesitaba la selección italiana en un partido tan importante, además de ser la jugadora que más eliminatorias ha disputado en su país (29).

El encuentro de dobles que cerró la eliminatoria empezó movido para ambas parejas, primero fue Italia la que se adelantó (3-0), después Ucrania la que devolvió la rotura (3-2) y de nuevo la pareja 'azzurra' la que se distanció (5-2).

Ucrania no conseguía encontrar remates fáciles ni espacios en media pista, mientras que la dupla Paolini-Errani se movía con acierto. Consiguió tres roturas y cerró el set con un 6-2 más que merecido.

Intento de reacción

Sin embargo, todo lo que estaban haciendo mal las ucranianas en el primer set lo cambiaron en el segundo. Kichenok encontró los huecos y los ángulos que andaba buscando, mientras que Kostyuk creció desde la línea de fondo a base de misiles con su derecha.

En la recta final, la experiencia de Errani se impuso sobre Ucrania. Jugó bolas inteligentes y conectó globos para buscar los errores de sus rivales, que, desesperadas, intentaron ajustar demasiado sus golpes pero sin suerte.

Un 6-3 final que terminó con las ilusiones de unas e inundó de alegría a otras.