El Open de Singapur de tenis tendrá público si no hay nuevos contagios

Contará con la asistencia de 250 espectadores en semifinales y final

Jugadores, técnicos y oficiales procedentes del extranjero se someterán a diario a pruebas PCR

El japonés Taro Daniel pasa junto a un miembro del personal del torneo mientras limpia una cancha del Abierto de Singapur

El japonés Taro Daniel pasa junto a un miembro del personal del torneo mientras limpia una cancha del Abierto de Singapur / EFE

EFE

El Abierto de Singapur de tenis, que se disputa desde este lunes y hasta el domingo, contará con la asistencia de 250 espectadores en semifinales y final en el caso de que no se detecten nuevos contagios de covid-19 en la ciudad-Estado.

Todos los jugadores, técnicos y oficiales procedentes del extranjero tienen que someterse a diario a pruebas PCR, entre otras medidas implementadas por los organizadores para mantener la seguridad y evitar los contagios.

Al menos 200 personas procedentes de otros países han llegado a Singapur para la disputa del torneo de categoría 250, la más baja dentro del circuito ATP, y que recoge el testigo del Abierto de Australia.

Las primeras rondas del torneo, que cuenta con la participación del francés Adrian Mannarino (36 del clasificación mundial) o el croata Marin Cilic (43) como nombres más destacados, arrancan hoy sin espectadores.

Los organizadores valorarán si en semifinal o en la final, esta última prevista para el domingo, contarán con la asistencia máxima de 250 espectadores, con el condicionante de que no se detecten en los días anteriores nuevos contagios locales de coronavirus en Singapur.

Desde el inicio de la pandemia, la ciudad-Estado ha confirmado 59.869 infectados con la covid-19, la gran mayoría por el brote en los barracones donde viven los trabajadores inmigrantes, incluidos 29 muertos.

En el informe del domingo, las autoridades sanitarias anunciaron 11 nuevos casos, todos procedentes del extranjero y que se encuentran en los centros de cuarentena.

El último contagio local se detectó el 17 de febrero