Muguruza: "Conchita sabe lo que es estar en mi situación"

Garbiñe Muguruza (Caracas, 1993) es la número uno del tenis femenino español y, un día después de un nuevo título para el deporte en este país como fue la consecución de la sexta Ensaladera de la ‘Armada’ charla, en exclusiva, con SPORT. Desprende mucha energía y se le ve con las pilas cargadas para volver a competir.

La actual número 35 del ranking WTA analiza el regreso a su banquillo de la extenista Conchita Martínez con la que tocó el cielo en Wimbledon 2017, su pretemporada por los Estados Unidos y también un 2020 que afronta con el objetivo de volver a situarse en lo más alto, entre otros temas.

P: Anunciaste hace pocos días tu vinculación con Conchita desde ya. Fue una de las piezas clave para conseguir tu segundo Grand Slam hace un par de temporadas. ¿Qué es lo que más valoras de ella?

R: Es una mujer con mucha experiencia en el deporte y sabe lo que es estar en mi situación como extenista. Tengo una relación con ella muy buena desde que la conocí con 14 años. Siempre hemos tenido, no sé, una sensación juntas diferente y estoy contenta de poder contar con ella. Ha sido una decisión muy bonita porque nos llevamos genial.

Ya viene siendo habitual en los últimos años que escojas para tu pretemporada marcharte a Estados Unidos. ¿Por qué?

Como el tenis se juega al aire libre y ahora aquí y en Europa hace demasiado frío, siempre intento irme a Estados Unidos porque tienen unas instalaciones geniales. La temperatura para el tenis es mejor porque empezamos en Australia que será verano. 

Se te notan las ganas de volver. 

Tengo muchísimas ganas de sudar y coger la raqueta y, en definitiva, de trabajar duro. Soy muy energética y empiezo siempre cada temporada con mucha ilusión.

¿Cómo se prepara esa vuelta a la competición?

Diciembre es nuestro mes de pretemporada porque de enero a noviembre es casi todo seguido. Es un mes de mucho entrenamiento y también de mucha preparación física.

Y luego empieza la gira por tierras australianas...

Todavía no he cerrado mi calendario (sonríe). Estoy trabajando en ello dependiendo de las sensaciones.

Nunca lo has ganado, pero el Open de Australia está bien marcado en tu calendario.

Sí. Melbourne es uno de los fijos. Es uno de los Grand Slams que a todas nos encantan y que siempre quiero ganar. Ojalá lo consiga algún día. 

Siempre comentas que no piensa excesivamente en el futuro y prefieres centrarte en el día a día, pero ¿cuáles son tus objetivos tras este 2019?

Es muy difícil responder a esto porque empezamos todas de cero. En mi caso solo puedo decir que empiezo con la ilusión y la motivación al máximo como cada año. Como nada está garantizado, el año empieza a surgir y ojalá vaya muy bien. Siempre hay contratiempos. En fin, se trata de lidiar con muchas cosas, pero lo importante es que estoy contenta porque ya empezamos.

Y, además, será año olímpico... 

Sí. Es un evento muy especial para todos los deportistas. Es una oportunidad cada cuatro años y solo hay tres que consiguen medalla y es como una lucha por lograrlo. Y me apetece muchísimo ir.

En los medios siempre se habla de que está costando encontrar el relevo al ‘Big Three’, pero en el circuito femenino sucede lo contrario. La competencia es altísima en estos últimos años.

El nivel ha mejorado muchísimo. El nivel medio de antes ahora es muy alto. Siento que cualquiera puede ganar el torneo. La que juegue bien esa semana se lleva el título. Da igual el ranking que tenga porque son todas muy buenas y compiten siempre al máximo.

Cambiando de registro y a raíz del triunfo de España en esta reformada Copa Davis. ¿Qué te parece que también la ITF haya decidido reformular la Copa Federación?

Me gusta. Es una competición muy divertida. Siempre lo digo. A la vez muy dura porque es en equipo y sientes una presión muy grande, pero es muy bonito compartir esa semana con las compañeras. 

Primero tocará recibir a Japón en febrero en La Manga y ganar el billete a Budapest.

Sí. Veremos qué equipo decide formar la capitana. 

A día de hoy, hay cuatro tenistas españolas entre las cien mejores del planeta. Así es más fácil confeccionar una lista. 

La verdad es que no es nada fácil tener a jugadoras en el ‘top 100’ porque hay que trabajar mucho. Es un circuito difícil y muy competitivo. Tenemos buenas jugadores y, además, en España hay una gran tradición de base de tenis. Siempre habrá tenistas jugando bien.