Nicola Kuhn da un paso adelante

Nicola Kuhn es uno de los nombres que cualquier buen amante del tenis en España debería recordar desde esta misma temporada. Solo tiene 19 años, pero el español de madre rusa y padre alemán, llega con ganas de dar que hablar en este 2019 que podría ser el año de su 'explosión' en el circuito profesional.

En la jornada de este martes del Barcelona Open Banc Sabadell, Kuhn dio buena prueba de ello. La organización del torneo decidió invitarlo para disputar el cuadro final y demostró con creces que la oportunidad lo merecía. El joven prodigio español derrotó en tres mangas al argentino 'Fede' Delbonis (7-6, 4-6 y 6-2). Acompañado de cerca por su entrenador, Iván Navarro, consiguió someter a su rival, visiblemente agotado, en el tercer y definitivo set. La batalla duró cerca de dos horas y media y, ahora, tendrá menos de 24 horas para recuperarse antes de afrontar su próximo compromiso.

Eso sí, el español ya sabe lo que es ganar en un Masters 1000. El pasado año venció a Darin King en Miami y este año repitió, gracias a otra invitación, pero los nervios le pasaron una mala jugada. Llevó al tercer set al alemán Mischa Zverev, pero unos calambres le derrumbaron en el sentido más literal de la palabra. Tras el partido, Kuhn aseguró que se llevaba una buena lección pero que, definitivamente, había encontrado el camino a seguir parar crecer como tenista.

FOGNINI, PRÓXIMO RIVAL

El 'premio' para Kuhn en la Ciudad Condal llegará este miércoles. Se enfrentará, por primera vez, a todo un ganador de un Masters 1000 como es Fabio Fognini, precisamente, su verdugo el pasado año en la cita de Miami. Tras ganar esta pasada semana en Monte Carlo, el italiano aterriza en Barcelona para mantener su más que notable estado de forma y debutará ante el español.

Ahora mismo, el de Arma di Taggia se encuentra situado en la duodécima posición del ránking ATP por lo que el español tendrá enfrente su mayor obstáculo hasta la fecha. A sus 31 años, Fognini fue capaz de doblegar por tercera vez en su carrera y sobre tierra batida a Rafa Nadal. Ahora le llega el turno a Kuhn. Eso sí, sin nada que perder, sobre todo, tras conseguir su primer triunfo en un cuadro final de un ATP 500.