Paleontología

Descubren en Portugal los restos del mayor dinosaurio europeo

Pertenecen a un saurópodo de unos 12 metros de alto y 25 de largo que vivió hace unos 100 millones de años

El esqueleto de dinosaurio descubierto en Portugal y el equipo de paleontología.

El esqueleto de dinosaurio descubierto en Portugal y el equipo de paleontología. / Instituto Dom Luiz (Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa) (Portugal).

Redacción T21

Investigadores portugueses y españoles han descubierto el esqueleto fosilizado de un dinosaurio gigante en el jardín de una casa en Pombal, Portugal. Se cree que es un saurópodo y uno de los especímenes más grandes jamás descubiertos en Europa, quizás incluso en el mundo.

Los restos del que puede ser el dinosaurio más grande que se haya encontrado en Europa han sido descubiertos en el patio trasero de una casa de Pombal, una ciudad de la región central de Portugal.

Los restos, que podrían corresponder a un dinosaurio saurópodo de aproximadamente 12 metros de alto y 25 metros de largo, están siendo estudiados por un equipo de investigación internacional.

Todo comenzó en 2017. El dueño de una propiedad notó la presencia de varios fragmentos de huesos fosilizados en su patio, cuando realizaba trabajos de construcción, y contactó al equipo de investigación, que realizó la primera campaña de excavación.

Más recientemente, entre el 1 y el 10 de agosto de 2022, paleontólogos portugueses y españoles que trabajan en el yacimiento han estado desenterrando lo que pueden ser los restos del dinosaurio saurópodo más grande encontrado en Europa.

Comían piedras

Los saurópodos eran dinosaurios de enormes proporciones que exhibían un característico cuello largo, con 10 o más vértebras cervicales, así como una cabeza pequeña, patas gruesas y una cola robusta.

Por lo general, sus dientes eran espatulados o lanceolados, por lo que no resultaban efectivos para la masticación. Debido a ello, ingerían piedras denominadas gastrolitos, las cuales facilitaban los procesos de digestión al remoler los vegetales en la molleja.

“No es habitual encontrar todas las costillas de un animal así, y mucho menos en esta posición, manteniendo su posición anatómica original. Este modo de preservación es relativamente poco común en el registro fósil de dinosaurios, en particular de saurópodos del Jurásico Superior portugués”,

explica

Elisabete Malafaia, investigadora postdoctoral de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa (Ciências ULisboa), Portugal.

Jurásico superior

Hasta el momento, se ha recolectado del sitio un importante conjunto de elementos del esqueleto axial, que incluye vértebras y costillas de un posible dinosaurio saurópodo braquiosáurido.

El grupo Brachiosauridae está compuesto por especies de gran tamaño que vivieron desde el Jurásico Superior hasta el Cretácico Inferior, hace aproximadamente 160 a 100 millones de años, y se caracterizan por la presencia de extremidades anteriores marcadamente desarrolladas.

Algunas de las especies de dinosaurios más emblemáticas pertenecen a este grupo de saurópodos, como Brachiosaurus altithorax y Giraffatitan brancai, así como la especie del Jurásico Superior portugués que se encuentra en la región Oeste de Portugal, Lusotitan atalaiensis.

Hallazgo significativo

Las características de conservación de los fósiles y su disposición indican la posible presencia de otras partes del esqueleto de este individuo, hipótesis que será contrastada en futuras campañas de excavación en el yacimiento.

“La investigación en la localidad paleontológica de Monte Agudo confirma que la región de Pombal cuenta con un importante registro fósil de vertebrados del Jurásico Superior, lo que ha permitido en las últimas décadas el hallazgo de abundantes materiales muy significativos para el conocimiento de las faunas continentales que habitaron la Península Ibérica hace unos 145 millones de años”, añade Elisabete Malafaia.

El trabajo está siendo realizado por investigadores del Instituto Dom Luiz de Ciências ULisboa (Portugal), el Grupo de Biología Evolutiva de la UNED-Madrid (España) y la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid (España), y contó con el apoyo de Ayuntamiento de Pombal.