¿Deberías comprar una tarjeta gráfica de segunda mano procedente de la minería de criptodivisas?

Las criptomonedas se han hundido en un pozo tan profundo que muchos consideran que no va a volver a subir a sus valores anteriores nunca más. El BitCoin ha caído en los últimos seis meses un 54,4%, una cifra escandalosa si tenemos en cuenta que hace relativamente poco valían más de 50.000 dólares (algo más de 45.000 euros). Ahora, con el BitCoin en 18.000 euros, muchos se preguntan si realmente merece la pena invertir en las granjas de criptomonedas.

Paralelamente, muchos usuarios de estas granjas han puesto a la venta sus productos más preciados: las tarjetas gráficas que sirven para minar los bloques de blockchain en su ardua búsqueda para minar.

Así, el mercado de segunda mano se ha llenado de tarjetas gráficas procedentes de granjas de criptominado a unos precios muy suculentos. Pero, ¿realmente merece la pena comprar una de estas gráficas?

Lo cierto es que no, los ventiladores adolecen de problemas después de estar trabajando 24 horas al día, los siete días de la semana. Las técnicas de criptominado son realmente exigentes con sus procesos, lo que hace que las tarjetas gráficas se calienten y se pongan a trabajara altas temperaturas. Los ventiladores se resienten y podrían dar problemas.

Pero este es el menor de todos los handicaps con los que cuenta comprar una tarjeta gráfica de estas características. Muchas pierden módulos enteros de VRAM que se vuelven inservibles. Algunos usuarios, tal y como recoge Digital Trends, han comprado gráficas como la Nvidia 3080 RTX y se han dado cuenta que de los 10GB de VRAM que traen, les reconocen tan solo 8GB o incluso menos.

Por lo tanto, aunque ahorras mucho dinero, lo cierto es que también estás comprando productos con una vida útil muy corta.