Alcácer y Sancho noquean al Bayern

El Borussia Dortmund conquista la Supercopa ante el Bayern

El resumen de la victoria del Dortmund ante el Bayern en la Supercopa alemana / Perform

Albert Gracia

Los delanteros tienen esto. Que no están, que no aparecen... Hasta que lo hacen. Ni Alcácer ni Sancho hicieron su mejor partido pero demostraron que tienen el gol en la sangre. Dos chispazos suyos fueron suficiente para noquear a un Bayern que le da la razón a Kovac: hacen falta fichajes. Los bávaros tuvieron el control pero el Dortmund se hizo grande a la contra. Primer título de la era Favre. Primer título para Alcácer. 

120565

Supercopa

2
0
Alineaciones
Borussia Dortmund
Hitz; Piszczek (Wolf, 80'), Toprak, Akanji, Schulz; Witsel, Weigl; Sancho (Bruun Larsen, 80'), Reus, Guerreiro (Achraf, 75'); Alcácer.
Bayern Múnich
Neuer; Kimmich, Süle, Boateng, Alaba (Sanches, 70'); Goretzka, Thiago (Pavard, 80'), Tolisso; Müller (Davies, 66'), Lewandowski y Coman.

Una final siempre es una final. Y si encima es un Dortmund-Bayern el partido ya coge color a partidazo. Era un 3 de agosto, sí. Era el primer partido oficial de la temporada, sí. Había muchas ausencias por parte de ambos conjuntos y con las plantillas por definir, también. Pero tocaba ganar y a eso salieron los dos. Con sus armas pero con los dientes afilados. 

El Dortmund sabía que ante un centro del campo de la calidad de Thiago, Goretzka, Tolisso -y Kimmich que siempre suele andar por allí- tocaba echar el cerrojo, replegar las líneas y buscar lo que tanto buscó y encontró la temporada pasada: robar y contraatacar. Con Reus, Sancho, Guerreiro y Alcácer tienes mimbres para hacerlo y no tardó ni un solo minuto en demostrarlo.

Süle se durmió, Alcácer robó y catapultó a Guerreiro que la puso bien atrás para que Reus solo tuviera que empujarla. Bueno, se olvidó de las manos de un tal Neuer. El meta voló para evitar el primero cuando la afición aún ni se había sentado. Serio aviso para los bávaros. La ocasión no intimidó a Kovac, que ordenó a su equipo ser protagonista en el juego.

El tanque bávaro movió líneas y se fue decidido al ataque, dejando al descubierto su zona defensiva. Con el control no había problemas pero si el Dortmund robaba se destapaban las carencias. Boateng erró, Sancho se la puso a Alcácer al espacio y el de Torrent disparó viendo la salida en falso de Neuer. No hubo gol de milagro. 

El dominio era del bayern pero las ocasiones, del Dortmund. Aunque eso no duró demasiado. Thiago se hizo con el control del juego y el Bayern empezó a encajar el engranaje, sobre todo defensivamente. Las fugas por donde penetraban los de la cuenca del Ruhr desaparfecieron y los de Favre empezaron a sudar. El Bayern llegaba cada vez más rápido a la meta de Hitz y no había forma de contraatacar. Coman tuvo la más clara en la primera mitad pero nadie iba a ser capaz de mover el electrónico. Tocaba remar en la segunda parte. 

Aparecieron los de siempre

Parecía que el Dortmund iba a menos en el partido pero aparecieron los que siempre hacen daño. No estaban pero sí se les esperaba. Sancho robó, atrajo a todos los rivales y la puso a la frontal para que Alcácer anotara como más le gusta: rasita y ajustada al palo. El 1-0 era un jarro de agua fría para un Bayern superior en el control.

 Aun así, eso de poco vale. Tras el tanto del de Torrent, el Bayern buscó quemar todas sus naves y ocasiones tuvo, especialmente una que no acabó dentro de milagro después de que el balón rebotara por mil piernas en el área del Dortmund. Faltaba el último pase.

Los de Favre, por su parte, recularon y recularon, sabiendo que a la contra iban a hacer daño. Avisaron en un par de intentonas hasta que Sancho abrió brecha. Guerreiro se la puso con música, el inglés cabalgó y cabalgó y ante Neuer no falló. Con el 2-0, el Bayern lo siguió intentando pero ya no hubo forma.