El futuro de la sincro

Gemma Mengual, con la nueva hornada de la natación sincronizada

Gemma Mengual, con la nueva hornada de la natación sincronizada / Jorge Ayala/Gaspar J. Ruiz Lindberg

Carme Barceló

Carme Barceló

La miran y la admiran. Miriam Llovet, Martina Gras, Ada Martín, María Bofill y Giselle Bondia tienen entre 14 y 16 años. Son parte del futuro de la natación sincronizada. Para ellas, Gemma Mengual es su referente.

Junto a ella, completaron la puesta en escena de la colección que presentó la firma Escorpión en la pasarela de la 080 Barcelona Fashion. Un refrescante show, con el agua y las prendas de baño como protagonistas, en el que las jóvenes nadadoras debutaron en el front row. "Estás delante del futuro de la sincro -me decía Gemma mirando con cariño a sus discípulas-. Llega una hornada muy buena y están trabajando muy bien". El papel de la campeona de sincronizada es "controlar esta base que sube y sumar junto al equipo técnico. A la Federación le preocupa que haya un buen seguimiento de las próximas generaciones y en ello estamos". 

El futuro son ellas. El presente pasa por un Mundial en Corea dentro de quince días en el que Ona Carbonell, según su ex compañera y amiga, "hará medalla seguro. Le ha ido genial tomarse un año sabático porque ha regresado con más fuerza y concentración que nunca. Ona está en un momento excepcional". Estará muy pendiente "del dúo mixto. Pau y Emma lo están haciendo extraordinariamente bien".

Y, dentro de un año, los Juegos Olímpicos de Tokio. "Allí veré a las niñas que he visto crecer -explica Gemma Mengual con cierta nostalgia-. Están muy motivadas para ir a por todas. Es un equipo bonito, con mucha calidad y que ha entendido muy bien las reglas del juego".