"Dejé el fútbol por el surf"

Garazi Sánchez

Garazi Sánchez / Valentí Enrich

Carme Barceló

Carme Barceló

Sentarte a esperar la ola y el viento. Ese es el mejor momento, aguardando a ver que te da la Naturaleza en medio de este caótico mundo plagado de tantos estímulos. Me cuesta mucho imaginarme lejos del mar”. A Garazi Sánchez te la puede acercar un triunfo, una agencia de comunicación o un sponsor, sí, pero la verdadera dimensión te la da ella misma. Llega cargada con la tabla de un amigo y una enorme bolsa. Melena al viento, nunca mejor dicho, un cabello que no se corta “en una peluquería desde hace siete años, por lo menos. Ahora estoy menos morena, llevo poco sol en el cuerpo. Pero ésta soy yo”.

LA VIDA Y LA AVENTURA

“Me crié en una familia distinta -explica, con su botella de agua y un café-. Mis padres son escaladores. Mi fin de semana ideal era dormir con un saco en la playa, viendo las estrellas, o en una caravana. A mis amigas les parecía una locura pero eso me hacía feliz. No había hotel mejor”. Subida a una tabla desde los 7 años, ha llegado tan lejos como la ha empujado su afán de aventura y de riesgo. También ha dado patadas a un balón hasta que “tuve que elegir. La cosa se puso seria con el surf y opté por él. Pero juego a fútbol desde niña. Con una amiga, formamos parte de un equipo que ganó la Copa Vizcaya. El resto eran chicos, claro”. Sonríe. Tiene fuerza y destila libertad desde una naturalidad máxima. Un día se apartó del mar. “Este medio define mucho a la persona -reconoce-. A los 18 años lo dejé porque necesitaba saber quien era yo sin ese estilo de vida que me definía tanto. A veces es necesario alejarte de lo que eres para conectarte con lo que eras antes”. Lo hizo. Y le fue de cine. 

TOKIO 2020

Ahora, su objetivo es lo que “antes era un sueño: llegar a los Juegos de Tokio. La posibilidad de clasificarse es real y solo el hecho de estar ahí ya es un paso de gigante para el surf. Cuando pienso que puedo estar en una villa olímpica con los mejores deportistas de la historia... ufff, ¡subidón!”. Lo imagina porque no lo ha visto. En su casa no hay un aparato de televisión. Prefiere quedar con los amigos en un bar para disfrutar de su Athletic o para “vernos y hablar sin teléfono ni redes sociales”. Garazi Sánchez, eso sí, utiliza los medios para “dar voz y valor a Mireia Belmonte, a Garbiñe, a Carolina Marín, a Sandra Sánchez y a todas las deportistas que consiguen y conseguimos cosas independientemente de nuestro sexo”.