Vecinos ruidosos

El del tercero toca la guitarra por las mañanas, el de arriba enchufa el taladro cada fin de semana o los del ático montan fiestas los jueves. Un vecino ruidoso es una pequeña molestia, uno de esos problemas que pueden amargarte un rato, pero poco más. Alex Ferguson llamó “noisy neighbours” al Manchester City alrededor de 2010, con un tono burlesco.

Por aquel entonces, Mánchester era roja. Los ‘Red devils’ dominaban el derbi de la ciudad y las vitrinas de Old Trafford estaban mucho más llenas que las del Etihad. El United incluso se había buscado otro rival, el Liverpool, con el que jugar de tú a tú.

Poco antes de que Ferguson se retirara, el Manchester United miraba por encima del hombro en una rivalidad antiquísima. Ganó por 3-0 el primer derbi mancuniano, disputado en 1881 entre el Newton Heath y el West Gorton. No es que hubieran perdido las licencias de sus nombres, es que todavía no se llamaban como los conocemos.

En sus primeros años fue un derbi en el que había fraternidad y después, como dijo Ferguson, el City nunca había pasado de ser un vecino ruidoso. Los ‘Skyblues’ fueron especialmente molestos en 1974. Denis Law, un ídolo en el Manchester United, donde formó tridente con George Best y Bobby Charlton, marcó, ya con la camiseta del City, el gol que envió a su antiguo equipo a segunda división. Su último tanto, el 300 de su carrera, no lo celebró. A saber si quiso marcarlo.

Otro día ruidoso, después de que Ferguson dijera aquellas palabras y poco antes de que se marchara, ocurrió en Old Trafford. Fue el histórico 1-6 que le endosó el Manchester City, con un doblete de Mario Balotelli, que lució en la camiseta aquel mítico ‘Why always me?’.

El 1-6 fue un resultado importante en el presente y en el futuro, tal y como explicaba Pablo Zabaleta, exjugador del Manchester City, en una entrevista en la revista Panenka: “El 1-6 fue un punto de inflexión. No solo para nosotros, también para ellos. Dimos un golpe encima de la mesa y lanzamos un mensaje. Ellos lo sintieron y a partir de ahí todo cambió”.

El Manchester United aún ganó una liga después de ese resultado, pero empezó un cambio de tendencia. El aleteo más importante del efecto mariposa fue la retirada de Ferguson, el entrenador de las 13 Premier Leagues. El Manchester United todavía es el equipo con más ligas, con 20, pero la última fue en 2013, cuando se marchó el técnico escocés.

El City está muy por detrás con ocho títulos ligueros, pero cuatro de ellos los ha ganado en los últimos cinco años y ha quedado por encima de su rival las últimas nueve temporadas. El cambio de tendencia es evidente después de que el United terminara la campaña pasada con su peor puntuación en la era Premier.

En el nombre del padre

Si la ausencia de Ferguson aún pesa en el derbi, la presencia más significativa es la de Haaland. Ha marcado más goles que 13 equipos de la Premier, entre ellos el Manchester United. Con sus 14 tantos en diez partidos también ha anotado más que Chelsea, Atlético de Madrid, Juventus y Borussia Dortmund.

El noruego tendrá además una cuenta pendiente. En un derbi de Mánchester, una entrada criminal de Roy Keane lesionó a Alf-Inge Haaland, su padre. Fue la venganza a un partido de 1997 en el que Keane cayó en el área y Haaland padre se lo recriminó. El irlandés se rompió el ligamento cruzado y guardó rencor cuatro años.

“Había esperado mucho tiempo, lo suficiente. Lo golpeé duro y pensé: ‘Toma esto, bastardo. Y no vuelvas a mirarme burlándote de falsas lesiones’. Incluso en el vestuario, después, ya no tenía remordimientos. Mi actitud fue la de ‘a la mierda con él’”, escribió Keane en su autobiografía. El padre de Haaland, que apenas se había lesionado en su carrera, disputó cinco partidos más después de aquella entrada criminal, solo uno como titular.

Haaland es el presente que empieza. Cristiano Ronaldo, el presente que termina. Ambos pelearán por robarle a Rooney el honor de haber marcado el mejor gol en un derbi, una chilena que se convirtió en una obra de arte. El City, invicto con cinco victorias y dos empates, es segundo con 17 puntos.

El United es quinto con 12 puntos y un partido menos después de un pésimo inicio de Ten Hag, derrotado ante Brighton y Brentford. Pero la victoria contra el Liverpool fue un acicate. Ahora acumula cuatro victorias consecutivas, una contra el Arsenal, la única derrota de los de Arteta. El Manchester United se ha convertido en un matagigantes, quizás porque, por ahora, ha dejado de serlo. Ahora son ellos los vecinos ruidosos