Maldito diario

Vila-real, 19 de abril de 2022 

Querido diario. Qué largas que se hacen las Ligas. Con lo bonitas que son las eliminatorias europeas. En eso sí que soy un experto. La Champions y la Europa League no son tan distintas. Si se te da bien una, se te da bien la otra. Dímelo a mí. De la misma manera, si se te da mal una, se te da mal la otra. Díselo al amigo Xavi, jeje… Qué cosas: con la bronca que tuvimos, y a lo mejor le acabo dando a su afición la única alegría de la temporada.

Pero vayamos paso a paso. Lo de cargarnos al Bayern no estuvo mal, ¿eh? Nos hicimos respetar. Hasta nos compararon con el Equipo A (ya sabes, a mí también me gusta que los planes salgan bien). Pero igual exageran un poco… Ya me gustaría tener a M.A. en mi equipo: potencia física, carácter… ¡Se iría derechito al mediocentro! Además, el Equipo A salía cada dos por tres en la tele, pero al Villarreal, por muy arriesgadas y espectaculares que sean sus misiones, le dan menos minutos en prime time que a la teletienda.

Pero, vaya, mucho mejor que me comparen con Hannibal que tener que escuchar otra vez la cantinela de que Vila-real es como la aldea de Astérix y Obélix… Quita, quita; no quiero saber nada de historietas galas. Qué pereza me daría tenerme que poner otra vez con el francés. Malos recuerdos: París fue uno de los pocos sitios en los que me quedé sin mi pócima mágica. Y luego, en el Arsenal, más de lo mismo. Será que los equipos llenos de estrellas no se me dan bien. A mí los jugadores que siempre me han hecho feliz son los que tienen un perfil bajo, los que son polivalentes, comprometidos… ¿Jugadores como Sergi Roberto, dices? Qué cabrón, querido diario, qué cabrón.

Aquel capítulo con el PSG en el Camp Nou sí que me hizo sentir como Hannibal: con un buen puro entre manos y ganas de esconderme después de haber cabreado a gente con mucho poder. Ya ves que lo de poner nerviosos a los clubes poderosos es mi especialidad (aunque mucho mejor cuando son los rivales y no mi propio equipo). Siguiente objetivo: Liverpool. Como pasemos y después le ganemos la final al Madrid, igual acabamos acusados de ‘un delito’ que, en este caso, sí que habremos cometido. Me da que ese día, por fin, saldríamos en todas las televisiones.

Unai E.