Un KO europeo que obliga a ajustar las cuentas

El Sevilla contemplaba en su presupuesto llegar a cuartos de Champions y ahora puede verse obligado a vender más de lo que quería

De ocho veces que ha jugado la máxima competición continental de clubes, el cuadro de Nervión ha caído en octavos en la mitad

El Sevilla se quedó con la miel en los labios en Dortmund

El Sevilla se quedó con la miel en los labios en Dortmund / AFP

Roger Payró

Se las prometía muy felices el Sevilla esta temporada, pero en cuestión de dos semanas se le ha ido casi todo al traste. El Barcelona le remontó en Copa cuando ya se veía en la final y el Borussia Dortmund –o Haaland, mejor dicho- le sacó por la fuerza de Europa. En liga sigue cumpliendo con el objetivo de clasificarse para la Champions, si bien no hace tanto aún entraba en las cábalas como posible campeón. Ahora, el triunvirato formado por Atlético, Barcelona y Real Madrid le ha dejado en la estacada. Deportivamente se le puede reprochar poco al equipo, aunque el último KO tendrá consecuencias económicas para la entidad.

El pasado diciembre el Sevilla presentó un presupuesto de 226,6 millones de euros, en el que se contemplaban 80,6 millones en concepto de participación en competiciones, básicamente la Champions, así como otros 18 en concepto de márketing. El problema es que verse fuera en octavos no entraba en los planes.

La entidad nervionense contemplaba alcanzar, al menos, los cuartos, por lo que los 10,5 millones de euros que no recibirá de forma directa así como otros montantes derivados de los mismos deberán salir de otro sitio.

Monchi ya sabe que se le ha girado trabajo. Más del habitual. Habituado a ser un club vendedor, la intención era la de no desprenderse de ninguna pieza clave… pero la realidad es la que es. Futbolistas como Diego Carlos, Koundé, En-Nesyri y Ocampos son de los que más cartel tienen y si hay ofertas buenas se estudiarán.

Lo cierto es que el Sevilla se volvió a estampar contra los octavos en la máxima competición de clubes continental de clubes. Nadie duda que la Europa League es ‘suya’, aunque cuando se ha medido con los ‘mayores’ no siempre le ha salido cara. El conjunto andaluz afrontó esta temporada por séptima vez una participación en La Liga de Campeones, la octava si se cuenta que disputó también el torneo que le antecedió, la Copa de Europa, y en cuatro ocasiones quedó frenada su progresión en los octavos de final.