La vuelta de Luis Enrique ha de ser ratificada por la junta directiva de la RFEF

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Ramón Fuentes

El pasado viernes anunciábamos en el diario SPORT que la Federación Española de Fútbol había cancelado la Junta Directiva que estaba convocada para hoy martes 19 de noviembre. Una convocatoria que se canceló repentinamente y sin nueva fecha de celebración. Y que puede explicarse en la decisión que tiene previsto comunicar precisamente hoy martes el presidente Luis Rubiales. Y es el nuevo seleccionador que se hará cargo del equipo español para la próxima Eurocopa. Cargo que volverá a ocupar Luis Enrique después de que el 19 de junio pasado la RFEF anunciara la renuncia del entrenador asturiano ante su delicada situación personal. 

Una decisión de oficializar al "nuevo" entrenador de la selección, que aún tratándose del regreso de Luis Enrique, debe ser aprobada previamente por la Junta Directiva del organismo federativo antes de su nueva presentación oficial. Así lo establecen los Estatutos de la RFEF. Concretamente en su artículo 35 relativo a la propia Junta donde textualmente dice que entre las competencias está: “Designar, a propuesta del Presidente, a los Seleccionadores Nacionales, así como al equipo técnico”.

Luego la confirmación del regreso de Luis Enrique como seleccionador, aún contando sus excepcionales situaciones, requiere ser nombrado previamente por el órgano directivo federativo tal y como se produjo el día que el asturiano fue nombrado entrenador el 9 de julio del 2018. Ese día Luis Rubiales presentó ante la Junta a Luis Enrique para que ratificara la propuesta su nombramiento y fue posteriormente en rueda de prensa donde se hizo oficial su nombramiento. 

Porque de no hacerlo así, la RFEF se expone a que este nombramiento pudiera ser impugnado por cualquier de los actuales miembros de la Junta Directiva como cualquier miembro de la Asamblea General. Como pudo haber sucedido con la destitución de Julen Lopetegui el 14 de junio de 2018 y el nombramiento de Fernando Hierro en Rusia. Entonces las circunstancias especiales propiciaron que este nuevo nombramiento lo designara el propio Luis Rubiales.

Una decisión que pudo ser impugnada dado que no se convocó ninguna Junta Directiva, al encontrarse toda la delegación española y el propio presidente en Rusia, y que explica el porqué la RFEF llevó a cabo una modificación reglamentaria en octubre del 2018 en su normativa donde establece que la Junta, en situaciones especiales, no tiene porque reunirse físicamente sino puede hacerse vía telemática en situaciones excepcionales. Mecanismo que utilizó por ejemplo el pasado mes de julio cuando Luis Rubiales convocó de manera urgente y telemática a su Junta Directiva para decidir como se cubría la vacante del Reus.

Es más, en la propuesta de Estatutos aprobada el pasado 10 de junio y que está todavía pendiente de aprobación por la Comisión Directiva del CSD, incluye la posibilidad de que un Comité de Urgencia formado por presidente, varios vicepresidentes puedan adoptar decisiones sin necesidad de una Junta, incluso telemática.

Porque la elección de Robert Moreno el pasado 19 de junio de este mismo año se adoptó sin ser previamente designado por la Junta Directiva de la RFEF a propuesta del presidente. Fueron Luis Rubiales y José Francisco Molina como director deportivo quienes adoptaron la decisión. Un nombramiento que no fue ratificado por la Junta Directiva de la RFEF hasta la siguiente reunión del 4 de julio.

Un organismo que actualmente forman 38 miembros donde está el propio presidente, ocho vicepresidentes y hasta 27 miembros de clubes y distintos organismos del fútbol español. De ahí que, viendo los acontecimientos, lo normal es que sea en las próximas semanas cuando se convoque la Junta prevista para hoy y se determine el regreso de Luis Enrique