El 'sushi', la otra clave de la selección

Juegos de Río. Tras perder frente a Croacia (72-70) y Brasil (65-66), España derrotó con más pena que gloria a Nigeria (87-96) y necesitaba ganar a Lituania y a Argentina para pasar a cuartos. 

En la previa del choque ante los lituanos, el recién elegido presidente Jorge Garbajosa recibió una llamada de Juan Carlos Navarro. “Necesitamos que nos hagas un favor”, le dijo el exazulgrana al ‘jefe’ de la Federación, quien acababa de aterrizar en Madrid por un tema personal.

Garbajosa pensó en un problema de gran calado, pero la ‘Bomba’ zanjó sus dudas con una extraña petición. “Queremos cenar sushi”.

Desde la capital de España, el presidente de la FEB dirigió el operativo y la selección española cenó el tradicional manjar japonés después de que los miembros de la federación hiciesen varios viajes con bandejas y lograsen superar los férreos controles que imperan en la Villa Olímpica durante los Juegos. 

Con ‘Garbo’ recién llegado de vuelta a Río, España pasó por encima de Lituania al día siguiente (109-59) y acabó conquistando el bronce en la gran cita brasileña.

Tres años después se ha repetido la historia. Tras superar en cuartos a Polonia por 90-78, los de Sergio Scariolo repitieron su demanda. Querían cenar sushiotra vez.

Al estar todos en el mismo hotel, la infraestructura fue más sencilla. Y una vez más surtió efecto, ya que España resurgió cuando peor lo tenía para superar a Australia en ‘semis’ (95-88) y acabar siendo oro.