Sergio Herrera y Caro, los aniquiladores del penalti

Lluís Payarols

Lluís Payarols

El inicio de la jornada 8 en la Liga 1|2|3 dejó un detalle que no suele ser habitual. Sergio Herrera y José Antonio Caro, los porteros de Osasuna y del Sevilla At., se hincharon a parar penaltis. Oficialmente, dos por barba, aunque en el caso del meta osasunista fueron tres.

No hubo manera de batirles desde los once metros, si bien Caro no pudo evitar la derrota de su equipo en el campo del Sporting, ya que los asturianos se impusieron por 3-0. Evitó una goleada mayor, por supuesto, pero no fue tan decisivo como Herrera, quien espoleó a los rojillos en el Ramón de Carranza.

DOS QUE FUERON TRES

Para el portero de Osasuna fue todo un reto. Y más teniendo en cuenta que en el primer penalti, que cometió él mismo sobre Servando, vio tarjeta amarilla. Era el minuto 14 del partido, pero su sangre fría le hizo adivinar la intención del cadista Aitor García

El segundo examen fue para nota. Minuto 66 y el balear Cuadra Fernández pitó pena máxima por el derribo de Fran Mérida a David Barral. El atacante del Cádiz chutó y Sergio Herrera volvió a parar... pero Cuadra ordenó repetir al ver que el portero se había adelantado antes del disparo. Barral volvió a la carga... y Sergio metió una mano salvadora otra vez. Oficialemnte detuvo dos penaltis, pero fueron tres.

La exhibición del guardameta espoleó a los suyos, que decidieron el partido con dianas de Xisco y De las Cuevas, ante la impotencia de un Cádiz estrellado en el que fuera portero del Huesca.

imbatible solo de penalti

Y horas antes, en el primer partido de la jornada 8, fue Caro quien gritó a los cuatro vientos que no le iban a batir de penalti. Primero adivinó lo que pretendía Scepovic, en el minuto 15. En los últimos instantes del encuentro, ya con el 3-0 para los sportinguistas, Carlos Castro buscó el cuarto también desde los once metros. Lo intento al estilo Panenka, pero el portero de La Palma del Condado volvió a impedirlo con su pie.

El idilio de Caro con las penas máximas no es niuevo. Años atrás, sí que fue decisivo para que el filial del Sevilla ascendiera a la categoría de plata, en una tanda de penaltis en el Viejo Nervión de amargo recuerdo para los seguidores del Lleida Esportiu. Caro detuvo un penalti al leridano Pau Bosch e incluso marcó la pena máxima definitiva. Fue el héroe  para un Sevilla At. que esta temporada es colista de la Liga 1|2|3.