La inoperancia de la Ponferradina choca con la solidez del Mirandés

Una Ponferradina inoperante en ataque y un Mirandés sólido en defensa pese a las ausencias y que enfoca la permanencia tras mantener la diferencia de puntos con la zona que marca el descenso, firmaron tablas sin goles este domingo.

Ponferradina-Mirandés 26/03/23

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PON

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MIR

Alineaciones

Ponferradina
Amir; Paris, Amo, Chakla, Adri Castellano; Dani Ojeda (Hugo Vallejo, 63'), Kelechi, Agus Medina, Naím (Yuri, 74'); Espiau (Naranjo, 63') y Derik.

Mirandés
Herrero; Prados, Michelis, Barbu; Juanlu, Gelabert (Roberto López, 74'), Álvaro Sanz (Oriol Rey, 63'), Salinas; Jofre (Llabrés, 84'), Raúl García, Pinchi.

Árbitro

García Verdura (catalán). TA: Naim (44'), Amo (65'), Agus Medina (71'), Amir (95')/Salinas (75'). TR: Beñat (87').

Estadio

El Toralín

Los rojillos disfrutaron en el largo tiempo de añadido -ocho minutos-, pese a encontrarse en inferioridad numérica, de la oportunidad más clara del encuentro tras escaparse en solitario su goleador Raúl García, pero cuando encaraba a Amir Abedzadeh llegó a tiempo Sofian Chakla para desviar su remate.

El punto deja a la Deportiva en una situación aún más complicada, sin aprovechar tropiezos de otros rivales como el Racing de Santander, a pesar de encadenar la tercera jornada sin conocer la derrota con cinco puntos sobre nueve disputados.

Fueron los bercianos los que, desde el primer instante, quisieron y tomaron el control del partido, dificultando las acciones a su rival, recuperando balones y buscando la portería de Alfonso Herrero, aunque sin encontrar demasiados resquicios en la retaguardia jabata, pese a las bajas y cambios obligados introducidos por Joseba Etxeberría.

El partido tenía color blanquiazul, pero sin demasiada profundidad ni llegadas claras al área rojilla, salvo dos disparos, casi sucesivos, de Espiau y Dani Ojeda, ambos desviados.

El Mirandés se limitaba a mantener las líneas juntas, sin crear prácticamente peligro en ataque con su máximo artillero, Raúl García, perfectamente controlado por la pareja de centrales deportivistas.

La mejor ocasión local llegó en un centro de Adri Castellano tras saque de esquina que encontró la cabeza de Edu Espiau, cuyo remate abajo encontró respuesta de Herrero para despejar el balón.

El inicio de la segunda parte mostró un Mirandés algo más ambicioso, al menos en los primeros instantes.

El partido se puso más espeso, estancado, con un equipo visitante cómodo en defensa ante la escasez de recursos y claridad ofensiva de la Deportiva, también agarrotada por la presión clasificatoria.

El encuentro dio un giro inesperado en el minuto 87 con la expulsión, por una dura entrada sobre Yuri de Souza de Beñat Prados, que dejó al Mirandés con un jugador menos.

El árbitro prolongó el partido ocho minutos, en los que los locales no crearon una sola oportunidad de peligro, todo lo contrario que su rival, que, en un balón largo a la espalda de la defensa berciana, encontró a Raúl García, que se escapó de Chakla y cuando se disponía a disparar ante el guardameta local, el propio defensor marroquí llegó a tiempo para impedir el remate con marchamo de gol.