La empresa Stellar Football tenía la intención de colocar activos en el Reus

Los largos y tendidos problemas que está teniendo el Reus, tal vez se hubieran podido solucionar con la entrada en escena de la empresa que se dedica a representar futbolistas como es Stellar Football. Según apunta Diari Més, el conglomerado habría ofrecido una aportación financiera de 1.5 millones de euros.

Esta cantidad económica no hubiera ido nada mal al equipo del conjunto de la capital del Baix Camp para, al menos, solventar parte de los problemas financieros que lleva arrastrando desde el verano pasado. A falta del informe del administrador concursal, los rojinegros están en una situación cada vez más critica y necesitarían encontrar una rápida y cuantiosa inversión.

El tiempo se les acaba y las goteras en las oficinas de la entidad continúan sin ser tapadas. Clifton Onolfo y sus socios, instalados en Estados Unidos y alejados de la ciudad catalana, por el momento no se han postulado de una manera firme y contundente con un movimiento pragmático que permita empezar a resolver los trámites financieros. Por el momento, gestionan sus movimientos desde la lejanía, dejando en el aire todo un mar de dudas en el entorno rojinegro.

Un plan que no gustó a Onolfo

La empresa de representación de futbolistas, en los que entre ellos se encuentra el actual delantero del Real Madrid, Gareth Bale, habría ofrecido un trato de favor al Reus para que el club catalán hubiera podido aliviar, al menos de manera más calmada, algunos de sus problemas económicos. Querían proyectar ayuda financiera de 1.5 millones de euros a los reusenses y un proyecto en el que, tanto el director deportivo como el entrenador ya estaban seleccionados por dicha empresa, tal y como destaca el rotativo tarraconense. Además, también se apunta que el míster que tenían escogido para este nuevo plan rojinegro era César Lainez, ex portero del Zaragoza.

Después de la negativa por parte de los actuales propietarios del Reus, la empresa Stellar Football no quiso insistir más en la inversión, ya que entre otras muchas cosas los rojinegros están al borde del abismo desde hace ya unos meses. Con todo y mientras pasa un tiempo muy valioso, los americanos continúan lejos de las instalaciones reusenses sin tener alguna que otra solución inminente que permita al Reus competir, al menos, en la Segunda División B la próxima campaña.