La afición rojinegra se solidariza con el Reus y recauda 3.200 euros

El Reus, preocupado por su desaparición

 Aficionados del cuadro catalán se acercaron hasta el entrenamiento para dar ánimos a la plantilla / Atlas

Xavi Turu

Buena parte de la afición del Reus ha hecho un gesto de buena voluntad. Después del largo período de impagos en el que se encuentran sumergidos los trabajadores del club, los socios y aficionados empezaron a construir una pequeña idea para intentar poner su granito de arena ante esta difícil situación.

El conjunto de la capital del Baix Camp continúa su andadura por tierras desconocidas. Pese a que los nuevos propietarios americanos aterrizaron hace ya algunas semanas en la ciudad, los empleados siguen sin cobrar sus nóminas atrasadas. La nueva sanción económica del pasado viernes a cargo de LaLiga, puso un poco más entre las cuerdas a los rojinegros, donde el mismo Clifton Onolfo destacó que durante esta semana y más concretamente este mismo lunes, empezarían a realizar parte de los pagos que se debe al personal del club.

Pese al naufragio económico de la entidad, este lunes por la mañana, algunos integrantes de la peña de animación Redblacks han hecho una entrega a los trabajadores reusenses con una cantidad de 3.200 euros. Los socios y aficionados del club catalán, en un gran gesto de apoyo a la entidad, consiguieron reunir esta cifra para que los trabajadores del Reus puedan gestionarlo de la manera que ellos crean más adecuada. Son ya 5 meses sin poder cobrar y cada día que pasa crece el nerviosismo.

Onolfo espera el descenso administrativo para quedarse

El CEO del CF Reus, Clifton Onolfo, está a la espera de la decisión final para que los rojinegros puedan intentar evadir la sanción de tres años sin poder competir. Cuando los americanos compraron el club desconocían todo el entramado que había creado el anterior propietario, Joan Oliver, y los condicionantes extras que estos supondrían para empezar a construir un nuevo proyecto.

A la amarga expulsión del fútbol profesional durante tres años, hay que añadirle la marcha de todos los futbolistas del primer equipo, que se marcharon en calidad de agentes libres. La carencia económica con la que se ha quedado el Reus es enorme, desplegando un largo camino deficitario.

Onolfo luchará para intentar conseguir que la sanción pueda eludir el castigo de tres años alejado de Segunda División A. En la junta de accionistas del pasado viernes por la noche, el americano ya analizó su nuevo plan para el Reus. Siempre que la resolución final sea un puro trámite de descenso administrativo, la próxima campaña todavía podríamos ver al americano a los mandos del nuevo proyecto reusense. Su idea, tal y como manifestó en la reunión con los accionistas minoritarios, es la de apostar fuerte con un proyecto de un millón de euros en Segunda B para conseguir un nuevo ascenso a la categoría de plata del fútbol estatal.