Los diez equipos catalanes de Segunda B estarán solos en un subgrupo

La RFEF dio a conocer el plan de regreso de los clubes no profesionales a la Segunda B dado el nuevo escenario derivado de la pandemia. Un plan que en el caso de la tercera categoría del fútbol español pasa por el protocolo que la RFEF y junto al resto de deportes de equipo como baloncesto, hockey, balonmano, etc... deben acordar con el CSD y con el Gobierno.

Una vez quede diseñado este protocolo de regreso a las competiciones debe pasar un mes hasta que comience la competición para que los equipos tengan un tiempo de preparación antes de afrontar la liga.

La próxima temporada habrá 62 descensos

Una liga de Segunda B que estará compuesta por 102 equipos después de que la Comisión Gestora acordara que asciendan los cuatro equipos que debían haber disputado la fase final de ascenso: Linares, Alcoyano, Lealtad y Marino.

Cómo y adelantamos en SPORT, la propuesta de la RFEF pasa por modificar la propuesta inicial de cinco grupos de veinte por diez grupos de diez condicionados por la proximidad geográfica. Y donde se irán incorporando los dos equipos de más en los grupos que les corresponda. Y donde además está previsto que desciendan 62 de los 102 clubes para poder adaptarlo al nacimiento de la categoría PRO.

Los equipos catalanes en el mismo grupo

Los equipos catalanes estarán en el grupo IV, concretamente en el subgrupo que estará compuesto por Cornella, Barcelona, Hospitalet, Lleida, Olot, Espanyol B, Llagostera, Nastic, Prat y Badalona. Es decir los 10 equipos catalanes estarán en el mismo grupo y no tendrá que desplazarse fuera. Pero aun con este escenario más comprensible, lo cierto y verdad que la decisión adoptada por la RFEF ha generado una situación de indefinición.

Hasta el punto que muchos clubes que tenían previsto arrancar sus entrenamientos en los próximos días. Según ha sabido SPORT muchos clubes que iban a empezar esta semana su pretemporada la han aplazado sin fecha hasta no tener un escenario más concreto. Más que nada porque muchos de ellos tenían los contratos de los jugadores condicionados al regreso precisamente a los entrenamientos. Luego todo lo que sea retrasar e comienzo supone que no debe el club hacer frente a estos salarios.

No están en esta situación aquellos clubes de la categoría de bronce que tengan ya los contratos firmados y siendo conscientes que, en el mejor de los escenarios, la liga no podría arrancar antes de mediados de octubre.

Siempre que el protocolo esté definido a mediados de septiembre y teniendo en cuenta además los trámites de la modificación de la competición que requiere de aprobarlo la comisión gestora y después remitirlo al CSD para su aprobación de la Comisión Directiva. Y no olvidemos que es una categoría que cuenta con equipos como el Barcelona B, o los recién descendidos Deportivo, Extremadura, Racing y Numancia.