Cómo hacer pan de castañas

Es una receta ideal para realizar en otoño y más aún cuando se acerca Halloween. El pan de castañas es delicioso y se puede preparar en muy poco tiempo. ¿Quieres saber cómo? Aquí te enseñamos la manera de cocinarlo.

Ingredientes:

•  1 kg de harina 000
•  150 g de harina de castaña
•  200 g de masa fermentada o masa fresca para pan
•  20 g de levadura fresca de panadería
•  20 g de sal
•  600 ml de agua
•  300 g de castañas peladas
•  1 cucharadita de miel o malta en su defecto

Modo de preparación

1. Prepara la harina 000 en la mesa. Es la harina idónea para preparar el pan ya que le va a dar mucho más color y sabor al plato, además de ser más elástica. Si quieres preparar el pan de castaña sin gluten deberás elegir harina sin gluten además de una levadura sin gluten.
2. Para iniciar la elaboración del pan de castañas, haz dos volcanes con las harinas. Para ello, deberás hacer una montaña con ambas harinas (la harina de castañas y la harina 000, en caso de hacer pan con gluten, o con la harina gluten free, si quieres hacer el pan sin gluten) en una superficie plana y hacer un agujero en medio.
3. En el agujero del volcán debes añadir la levadura troceada con agua y una cucharada de miel. En las paredes del volcán reparte la sal para que no se mezcle con la levadura.
4. Cuando se absorba el agua puedes añadir la masa fermentada. Mezcla bien la masa con los ingredientes hasta que logres una masa uniforme, elástica y firme.
5. Cuando tengas la masa, pica las castañas peladas. Cuando las hayas cortado, añádelas a la masa y vuelve a amasar. Haz una bola con la masa y tápala para que fermente.
6. Momento de dar forma a tu pan de castañas. Mientras lo hace, pon a precalentar el horno a unos 200ºC. El horneado dependerá de la forma del pan. Si haces pequeños bollos podrás tenerlos listos en unos 20 minutos, si quieres un pan más grande tardará algo más en lo que te recomendamos que dejes el honor a unos 180ºC.
7. Recuerda que es imprescindible que se haga bien por dentro sin quemarse por fuera. Vigila que el pan ni se dore demasiado ni, obviamente, se queme.