Nadal debuta en Roland Garros aplastando a Thompson

El balear, después de acabar cojo en Roma, se mostró plenamente recuperado sin acusar molestias y endosó un triple 6-2 al australiano

En el siguiente partido Nadal se enfrentará a Corentin Moutet, que derrotó por su parte a Stan Wawrinka y evitó el reencuentro con el suizo

Nadal se estrena con victoria en París

Nadal se estrena con victoria en París / AFP

Roger Payró

El único síndrome presente en la Philippe Chatrier fue el del campeón insaciable. Ni rastro del de Müller Weiss, esa enfermedad crónica por deformación del hueso escafoides del pie que lleva tiempo martirizando a Rafa Nadal y que fue la culpable de su derrota en octavos de Roma. Había dudas sobre cómo empezaría físicamente el balear la conquista del que podría ser su 14º Roland Garros y su 22º Grand Slam, pero Jordan Thompson fue un juguete roto en sus manos. El australiano acabó desquiciado ante un Nadal que llega pisando fuerte a la que es su casa. Triple 6-2 para empezar. Ya es el jugador con más victorias en un Grand Slam (106), superando las 105 de Federer en Wimbledon. En la arcilla parisina su balance es de 106-3. Da miedo.

En la Chatrier, la pista central, había atmósfera de partido grande. Cualquier con Rafa de por medio en París es como para no perdérselo. El ‘major’ parisino es el salón de su casa y el manacorí venció en pijama. Dominador de principio a fin, al pupilo de Carlos Moyá le costó aclimatarse un juego. Después, fue un rodillo imparable. Castigó sus dos primeras opciones de rotura y rápidamente colocó el 1-4 en el luminoso. Fruto de la relajación, tuvo que defender un break en contra. Nada grave, volvió a subir el ritmo y mantuvo el servicio. Se adjudicó ese set por 2-6 con un juego en blanco.

Se veía a un Nadal desenfadado, tranquilo. Incluso dejó una imagen poco habitual en él, como la de hacer una pequeña broma con la raqueta. La lanzó al vuelo para volverla a coger tras perder un punto. Se lo podía permitir. La segunda manga fue un calco de la primera, aunque esta vez ya empezó con una rotura de Rafa, que volvió a romper en el quinto juego.

De nuevo, el español bajó unas cuantas marchas y en esta ocasión Thompson sí se dio la alegría de conseguir la rotura. Poco le duró, pues Nadal contestó con un contrabreak y volvió a cerrar el set con otro juego en blanco.

Sacó la garra el australiano en la tercera manga, a la que ya llegó sin apenas moral contra un Nadal intratable. Aguantó en los primeros juegos, dejando para los reunidos en la Chatrier un punto espectacular en el quinto juego. Al final cayó de parte del español, poniendo así la puntilla a su rival. También lanzó el 'aussie' su raqueta, si bien en otro 'mood' que como lo hizo el balear.

Quebró en el siguiente juego al resto y repitió marcador por tercera vez. Muy buenas sensaciones de Nadal, que deberá prolongarlas en segunda ronda contra Corentin Moutet, que derrotó por su parte a Stan Wawrinka.