Roland Garros existió... y fue un gran aviador

Monsieur Garros, ese gran desconocido

Su nombre es conocido en todo el mundo al bautizarse con él una instalación dedicada al tenis. Roland Garros fue un gran aviador, héroe nacional galo, el primer hombre que sobrevoló el Mediterráneo hace ya un siglo

Neus Yerro

Nacido en la isla de Reunión en 1888, a los cuatro años Roland Garros emigró a Vietnam con sus padres donde vivió una década hasta que fue enviado a Cannes (Francia) para que concluyera sus estudios. Allí contrajo una neumonía de la que se recuperó gracias a la práctica del deporte. Fue entonces cuando se aficionó al tenis, disciplina en la que nunca destacó... pero sí lo hizo en ciclismo, rugby o fútbol.

Llegó el momento de establecerse en París donde conoce a Emile Lesieur, jugador de rugby del Stade Français, quien se hará famoso por lograr el primer ensayo de la historia para la selección francesa ante Inglaterra en 1906. Una amistad que hará inmortal a Roland.

Al terminar sus estudios Garros desea vivir aventuras. Abre una tienda de automóviles pero, fascinado por la aviación, logra adquirir un avión y lo aprende a maniobrar por sí solo (no había escuelas de aviación en la época). Se marcha al continente americano a realizar vuelos de exhibición e incluso impulsaría la creación de la Fuerza Aérea de Brasil.

A su regreso a Francia estableció el récord de altitud (3.910 metros) y su talento empieza a ser reconocido. El 23 de septiembre de 1913 pasa a la posteridad por realizar la primera travesía sobre el Mediterráneo, a los mandos del mítico Morane-Saulnier en 7 horas y 53 minutos. De vuelta a Francia es recibido como un héroe... pero entonces estalló la Primera Guerra Mundial. Con 26 años, se alista de inmediato como piloto.

Colaborará, con su amigo Saulnier, en la incorporación de una ametralladora a los aviones, lo que le permitió lograr tres victorias en combate. Pero el 18 de abril de 1915 se ve obligado a aterrizar por un fallo en el motor y lo hace en territorio ocupado. Es hecho prisionero y empezará una odisea de intentos de evasión y de traslados a distintos campos. A los tres años de cautividad logra escapar y se reincorpora, logrando otras dos victorias en combate. Pero el 5 de octubre de 1918, con 30 años, su avión se estrella en el departamento de Ardennes y muere.

Será casi una década más tarde cuando su amigo Lesieur, por aquel entonces presidente de Stade Français, podrá rendirle homenaje. Hay que construir un estadio para que los Mosqueteros defiendan el título de Copa Davis (1928) y se necesitan inversores. Lesieur será uno de ellos... con una sola condición: la instalación deberá llevar el nombre de Roland Garros. Entonces ni él ni nadie imaginó que el nombre de su amigo sería inmortal.