Zidane y el vestuario pierden sintonía

Francesc J. Gimeno

Francesc J. Gimeno

Los malos resultados ponen siempre al descubierto la tensiones latentes en el interior de un vestuario. Zinedine Zidane, entrenador del Real Madrid, lo ha vuelto a comprobar en primera persona tras el irregular arranque de temporada que está protagonizando su equipo. El enésimo tropiezo ante el Valencia en Mestalla ha servido para constatar que el técnico francés ha perdido su proverbial buena sintonía con el grueso de la plantilla y no goza del predicamento que tenía hasta hace poco. La causa de este evidente distanciamiento es su gestión del vestuario, una cualidad de la que siempre había presumido.

Los jugadores han empezado a cuestionar sus decisiones. Al igual que la directiva, no entienden sus últimas alineaciones y su apuesta por las rotaciones en Mestalla o Mönchengladbach, por citar dos ejemplos. Con el brasileño Casemiro y el belga Eden Hazard en cuarentena por culpa del coronavirus, a los pesos pesados del vestuario les sorprendió que Zidane dejase en el banquillo ante el Valencia a dos jugadores básicos en su actual esquema como el alemán Toni Kroos y el francés Ferland Mendy. Y el desbarajuste que se produjo tras el 0-1 no hizo otra cosa que darles la razón.

consignas desoídas

Paralelamente, Zidane está muy molesto con sus jugadores al entender que sus consignas están cayendo en saco roto. En Mestalla, por ejemplo, el equipo no mantuvo la misma concentración en defensa ni jugó con el mismo espíritu solidario que en el Camp Nou o frente al Inter de Milán, dos partidos que los jugadores se tomaron muy en serio conscientes de que se lo jugaban todo a una carta. Pero los futbolistas volvieron a relajarse contra el Valencia al pensar que todo estaba solucionado con el 0-1 de Benzema. Todo lo contrario. Zidane está enojado con las lagunas y las desconexiones de sus futbolistas y piensa tomar medidas de cara a los próximos partidos. Algunos jugadores le han decepcionado.

Uno de los motivos de esta pérdida de 'feeling' entre el técnico y sus hombres es la labor que está ejerciendo el segundo de Zidane, David Bettoni. Según desveló 'El Mundo', los jugadores consideran que el segundo entrenador madridista animó a Zidane a dejar de utilizar su característica mano izquierda y a recurrir al látigo en la gestión del vestuario, y también está detrás de algunos de sus 'experimentos tácticos'.