Zidane quiere afrancesar más el Madrid

Zinedine Zidane quiere reforzar su núcleo duro, especialmente en el vestuario, con la incorporación de más futbolistas franceses. La intención del técnico es seguir afrancesando el Real Madrid la próxima temporada con la llegada de Paul Pogba (una vieja aspiración de ‘Zizou’) y de  los jóvenes Upamecano y Camavinga. Una ‘guardia pretoriana’ dentro y fuera de los terrenos de juego para fortalecer su gestión del plantel.

La actual plantilla madridista ya cuenta con cuatro futbolistas franceses: Benzema, Varane, Mendy y Areola. Los dos primeros son, indiscutiblemente, piezas claves para ‘Zizou’ tanto en el terreno de juego como fuera; mientras que Mendy y Areola le permiten tramitar con comodidad y mucho margen el nuevo papel de Marcelo en el equipo (en clara decadencia futbolística) y cerrar la polémica que arrastraba la portería la pasada campaña. Zidane intentará conseguir la continuidad del cancerbero porque es uno de los suyos y asume con normalidad el banquillo sin crear problemas.

A estos cuatro jugadores se le une, además, los belgas Courtois y Hazard, que comparten el mismo idioma y se han sumado a la ‘guardia pretoriana’ del técnico.

Más franceses

Zidane empieza a trazar ya las líneas maestras del próximo proyecto deportivo blanco y su apuesta pasa, otra vez, por acudir al mercado francés. Los tres nombres que tiene subrayado el entrenador son los de Pogba (de nuevo intentará tenerlo bajo sus órdenes) y la de los jóvenes Upamecano (Leipzig) y Camavinga (Rennes). Será un Madrid más afrancesado aún si cabe.

En la entidad madridista entienden que esta vez será la definitiva con Pogba, tras sus anteriores intentos frustados por vestirlo de blanco. Es una vieja petición de ‘Zizou’. El futbolista, que recientemente ha reconocido llevar “mucho tiempo frustado”, parece que ahora ya ha pactado su salida a final de temporada del United. Acaba contrato el 30 de junio del 2021 y en verano será la última oportunidad en el club inglés para ingresar un traspaso importante por un futbolista que, recordemos, ha sido más noticia por los  problemas que ha creado en Old Trafford que por su buen rendimiento.

En el United ya planifican sin el futbolista galo; Mino Raiola, el agente de Pogba, lleva tiempo trabajando su salida del club. El italiano, que también representa a Areola, se frontará de nuevo las manos con la operación y con la suculenta comisión que obtendrá.

En los últimos días se apunta que la cifra que tendrá que desembolsar el Madrid por el internacional francés rondará los cien millones de euros, cantidad que Solskjaer cuenta para reestructurar la plantilla del United.

Los otros dos nombres que tiene en mente Zidane son los del central Dayot Upamecano y del centrocampista Eduardo Camavinga. Dos futbolistas que apuntan muy buenas maneras y que cuadran con la política de inversión a largo plazo de la entidad madridista, pues tienen solo 21 y 17 años respectivamente.

El central Dayot Upamecano, del Leipzig, es una de las revelaciones de la Bundesliga, donde está rindiendo a un altísimo nivel, sin duda. Ya se le compara con Varane. Comparte agente con Toni Kroos, lo que es una ventaja para el Real Madrid.

En Alemania ya asumen su marcha. “No somos vendedores, pero nos tocará vender” han señalado portavoces del Leipzig ante la crisis generada por el coronavirus y, además, por la postura del futbolista que no ha aceptado la propuesta de renovación que se le ha presentado. Acaba contra el 30 de junio del 2021 (percibe dos millones de euros anuales). Zidane lo quiere como tercer central por detrás de Varane y Sergio Ramos, por delante de Militao.

Completa la propuesta de afrancesar más el equipo el jovencísimo Eduardo Camavinga, centrocampista del Rennes. ‘Zizou’ lo quiere argumentando que ahora se pagará 40 o 50 millones de euros y en unos pocos años su precio se habrá disparado. El Rennes ya asume que no va a poder retener mucho tiempo a su joven estrella y está dispuesto a cerrar ahora su transferencia, pero intentaría que siguiese una temporada más cedido para que acabase de 'madurar' antes de dar el salto al Madrid.