Vinicius amenaza el futuro de Bale

Esta vez no fue de rebote: Vinicius enamoró al Bernabéu con un golazo de volea

Vinicius Jr. marcó un golazo de volea que supuso el 3-0 del Madrid ante el Leganés / LALIGA

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Dos partidos consecutivos de titular le han bastado a Vinicius para encandilar a la afición madridista. En una temporada ofensivamente triste, con Bale en el centro de la depresión, el brasileño es un soplo de aire fresco.

Es un jugador diferente, desequilibrante y con desparpajo, cualidades en desuso últimamente en el equipo blanco. Jugadores que actúan como oficinistas anclados a una rutina que siguen torciendo el gesto y agarrándose a las lamentaciones partido tras partido. Vinicius está agitando a un grupo acomodado. Intenta derribar barreras, la primera jugar y la siguiente, hacerse con el dorsal número 11, su número, y arrebatárselo a Bale.

La edad, único problema

Su fútbol de filigrana contrasta con el de carrera larga de Bale, al que no envidia ni su velocidad. Sólo la edad parece ser un problema. ¡Bendito problema! Y todo por un proteccionismo que frena su progresión. Pero las urgencias de un club que vendió a su mejor valor ofensivo, Cristiano Ronaldo, le da visibilidad, porque el relevo natural del portugués está resultando un impostor. El bajo rendimiento del internacional galés pone en bandeja las oportunidades al brasileño. Bale, como jugador de cristal, entra y sale del equipo, y deja huecos por donde se cuelan compañeros. Ya lo hizo Isco y ahora se quiere colar Vinicius.

El joven brasileño amenaza el futuro del británico que sigue sin hablar castellano, sin involucrarse en la dinámica del grupo y cuestionado por su falta de compromiso con la entidad. El club mantiene activada la opción de traspasar a Bale en verano y más si la sombra de Vinicius sigue creciendo en las próximas semanas. Y es que estamos hablando del jugador número 21 de la plantilla madridista en minutos disputados.