Una final en manos de Cristiano y Salah

Si Real Madrid y Liverpool son fieles a su naturaleza, la final de la Champions que esta noche se juega en Kiev promete ser un monumento al fútbol ofensivo: al fin y al cabo se citan los cuatro máximos goleadores de la competición (Cristiano, Salah, Firmino y Mané) en un escenario ya habitual para los futbolistas del Real Madrid, pero inédito para los del Liverpool.

Por encima del resto destacan dos nombres, los que representan el espíritu ofensivo de ambos equipos: de un lado, Cristiano Ronaldo, empeñado en mantener su idilio con la competición (suma 15 goles en Europa esta temporada) y convertido en el gran argumento ofensivo del Real Madrid, frente a la irregularidad de Bale y a la melancolía de Benzema.

Cristiano se mueve como nadie en el área: a riesgo de perder presencia en el juego del Madrid, ha ganado poderío rematador. De cara a la final, además, ha modificado sus hábitos, cambiando la dieta y reduciendo sus sesiones de pesas para afinar su punta de velocidad.

En el global de la temporada, el portugués suma 44 goles, curiosamente tantos como los que acumula el jugador de moda, el egipcio Mohamed Salah: acaba de batir el récord de goles en una Premier (32 tantos en 38 jornadas).

El delantero total

Llega a la final con un balance de 10 goles en la Champions y sobre todo, con la sensación de ser el delantero total: se mueve tan bien en el área como fuera de ella, tiene golpeo de media distancia y oportunismo, juega al pie y al espacio y tiene desborde y uno contra uno. Teóricamente, se presenta mejor acompañado, porque tanto Firmino (10 goles en Champions) como Mané (9) han hecho una temporada extraordinaria. 

De lo que no hay dudas es de su ambición: es su primera final de Champions y quiere ganarla. “Ellos la han ganado antes, pero es un partido, no dos, así que solo necesitamos centrarnos y no pensar en nada del pasado”, dijo. 

Como el luso, Salah también ha cambiado sus hábitos en los últimos días, en su caso por el Ramadán, aunque desde el Liverpool aseguran que no afectará a su rendimiento. 

las otras batallas de la final

Más allá del poder de ambas delanteras, el Madrid parte con una ventaja en otras zonas del campo: tiene un portero más experimentado (el alemán Loris Karius, meta del Liverpool, vive su primera experiencia en la Champions) y laterales teóricamente más profundos, con Marcelo y Carvajal frente a la inexperiencia de Alexander-Arnold y Robertson.

En la medular, el Madrid también presenta mejores argumentos: Henderson, Milner y Wijnaldum son futbolistas con un buen despliegue físico, pero con poca capacidad para guardar el balón frente al toque de Modric, Isco o Kroos.