Así fue la provocación de Sergio Ramos al Sánchez Pizjuán

Desde que se fue del Sevilla al Real Madrid en 2005, cada vez que Sergio Ramos vuelve al Sánchez Pizjuán el choque tiene un carácter especial tanto para el defensa de Camas como para los aficionados hispalenses. Este jueves no fue diferente.

Con 3-1 en el marcador y después de que el Sevilla tuviera ocasiones para marcar un cuarto gol, una falta absurda de Kranevitter sobre Casemiro dentro del área provocó que el colegiado del partido, Undiano Mallenco, señalara penalti a favor del Madrid. 

Sin nadie de la BBC en el campo, Sergio Ramos quiso asumir la responsabilidad y no falló desde los once metros. Es más, se permitió el lujo de marcar al estilo Panenka superando por arriba a un David Soria que se tiró mansamente a su derecha. 

Crecido por el gol levantó las manos y, tras pedir perdón a una parte del estadio, se dirigió al fondo del Sánchez Pizjuan en el que había marcado y, desafiante, se señaló el nombre de su camiseta con ira. Hasta dos veces lo hizo. 

El motivo no era otro que el hecho de que los 'Biris', los ultras del Sevilla, se encontraban en esa zona del campo. Un sector de la afición sevillista que, según confesó el propio Ramos tras el partido, se había pasado todo el partido insultándole... como sucede casi siempre que vuelve a pisar el que un día fuera su estadio.