Marco Asensio evita otro ridículo del Madrid de Zidane

Sin la BBC, sin Sergio Ramos... Zinedine Zidane volvió a apostar por el ‘plan B’ en Butarque para acabar echando mano de Modric e Isco para evitar otra decepción. El Madrid encarrila muy bien los cuartos de final de la Copa del Rey pero gracias solo al genial remate de Marco Asensio evitó otro chasco. Volvieron, de nuevo, a decepcionar.

106453

Copa del Rey

0
1
Alineaciones
Leganés
Champagne, Tito, Bustinza, Slovas, Diego Rico, Rubén Pérez (Brasanac, 61'), Gumbau, El Zhar, Eraso, Naranjo (Amrabat, 69') y Beauvue (Omar Ramos, 81').
Real Madrid
Casilla, Carvajal, Varane, Vallejo (Nacho, 14'), Theo Hernández, Marcos Llorente (Isco, 72'), Ceballos (Modric, 66'), Kovacevic, Lucas Vázquez, Borja Mayoral y Marco Asensio.

El Madrid se lleva de Butarque un 0-1 que deja la eliminatoria de claro color madridista, pero su imagen en el terreno de juego sigue siendo, por momentos, horrible. El Leganés  le plantó cara y solo cayó en el suspiro final. Marco Asensio se inventó un inverosimil remate a centro de Theo Hernández. Lo mejor del chaval en la noche evitó otro palo a Zidane. 

El guión del juego estaba cantado. El balón iba a ser del Madrid y al Leganés le tocaba defenderse. Los de Garitano resolvieron bien el examen, mientras que los madridistas confirmaron, otra vez, que su juego está en crisis. Ceballos, que lo intentó continuamente, Marco Asensio, Lucas Vázquez... fueron una sombra del juego que hace solo unos meses desplegaban sobre los terrenos de juego.

Aparte de la lesión muscular de Vallejo, solo dos acciones destacadas en la primera parte. La ocasión desaprovechada por Kovacevic (minuto 34) que se quedó solo ante Champagne –increíble error de Rubén Pérez– y remató pesimamente y, la segunda, jugada de Marco Asensio y centro que se paseó en paralelo por la línea de gol sin encontrar rematador.

En la segunda parte se vieron los mejores momentos del juego. El Leganés puso una marcha más, fue un poco más valiente en la presión, y le creó muchos problemas al Real Madrid. Casilla pasó por momentos de agobios como, en el minuto 66, un intento de despeje de Marco Llorente acabó con el balón estrellándose en el larguero con el portero batido. Casilla evitó con su parada el gol de Beauvue (74’).

Cuando los espectadores y los dos equipos daban por bueno el 0-0, llegó el remate de Marco Asensio. El chaval, muy gris como el resto del equipo, decantó el partido con una genialidad. Necesitaba una acción así para volver a creer. Creer él y para que el Madrid no se sonroje más. Un golazo no puede esconder el pésimo juego de los blancos.