Cristiano pudo con un bravo Girona

Jordi Gil

Jordi Gil

El Girona dejó una muy buena impresión en el Santiago Bernabéu, pese a marcharse con los mismos seis goles que recibió en el Camp Nou. En esta ocasion marcó tres goles y compitió por el partido hasta los últimos compases. La diferencia vino marcada por la eficacia de Cristiano Ronaldo, que superó los tres goles a balón prado surgidos de la pizarra de Pablo Machín.

El Real Madrid salió fuerte con un Marco Asensio muy activo. El mallorquín rompió la BBC ya que Gareth Bale se quedó en el banquillo y quiso demostrar que debería ser un jugador imprescindible para Zidane. Una de sus jugadas, cortada en falta al borde del área, permitió a Cristiano lanzar un zambombazo en una falta que Bono desvió a corener.

El conjunto blanco no quería dejar lugar para la sorpresa y Benzema filtró un gran pase a Lucas Vázquez, quien tampoco pudo con Bono. En pleno bombardeo blanco, el Girona despertó con un tiro de Borja García que desvió Keylor. Fue un ataque espóradico, puesto que el Madrid se avanzó pronto en el marcador. El Madrid sacó en corto un córner y Kroos sirvió a Cristiano para que el luso marcara de fuerte disparo.

Mojica rompe a Carvajal

El tanto parecía facilitar mucho la victoria blanca, pero los de Machín se soltaron y empezaron a jugar en campo contrario. Apareció Portu y, sobre todo, Mojica por la banda izquierda, rompiendo a un desafortunado Carvajal. El Girona empezó a tocar, pero no podía descuidarse ya que los fogonazos de Cristiano Ronaldo eran temibles.

La dinámica del partido estaba cambiando y giró definitivamente a raíz de una falta tan grosera como torpe de Carvajal. Granell la sirvió y Stuani ganó la partida al lateral blanco, que era su marcador, para cabecear de forma inapelable.

El empate era merecida y el Madrid tardó en reaccionar, aunque lo hizo a través de la calidad, en especial de Asensio que obligó a Bono a una gran intervención. Cristiano también tenía un hambre tremenda y terminó la primera parte probando una chilena que se marchó a las nubes.

Cristiano no perdona

Cristiano Ronaldo se marchó al descanso con el orgullo herido y salió en la segunda parte como un torbellino. Apenas necesitó dos minutos para aprovechar una asistencia de Benzeman y marcar con un violento disparo que entró tras impactar primero en el larguero. El portugués lo celebró con rabia en una prueba de la grandes dificultades puestas por el Girona.

El Madrid se volcó y la herida se hizo más grande, con una gran jugada en la que Cristiano dejó el tercer gol en bandeja a Lucas Vázquez. La tormenta blanca siguió con otro remate de Nacho al palo y el Girona se tambaleaba. Cristiano, insaciable, recogió el rechace de Bono tras un fallo de Benzema y anotó el cuarto tanto. Auqneu todo parecía sentenciado, el balón parada dio oxígeno a los gerundenses. Stuani volvió a superar a Carvajal en su salto y redujo distancias.

Arreón final del Girona

Este gol provocó que el Girona volvería a creer y Stuani pudo firmar su hat-trick particular. Primero con un balón peinado que se marchó por poco y después robando un balón a Varane, pero Keylor estuvo rápido para evitar el tanto. Los ataques catalanes fueron penalizados a la contra por Gareth Bale, que puso un quinto. Un tanto que, de forma increíble, no fue definitivo ya que Juanpe volvió a recortar distancias a balón parado. Quedaban solo dos minutos y Cristiano tuvo tiempo de sumar un 'poker' de goles y dejar una diferencia demasiada amplia por los merecimientos de ambos conjuntos.