El Real Madrid, a por el sueño del 'sextete'

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Arriba el telón de la temporada 2017-18 para el Real Madrid del soñado ‘sextete’, con la disputa de la Supercopa de Europa ante el todopoderoso Manchester United. Ese es el objetivo con el que fantasean los blancos bajo la batuta de un Zinedine Zidane que enlaza título tras título desde que se hizo cargo del equipo hace 18 meses. Los ‘Diablos Rojos’ de Mourinho serán quienes juzguen la capacidad de un Madrid que persigue hazañas solo conseguidas por el Barcelona. Un objetivo ambicioso para un equipo cuya pretemporada tiene desilusionada a su hinchada en la misma medida que enamorada por sus recientes triunfos. 

Zidane tiene trabajo por delante y su primera tarea es contraprogramar lo que Mourinho prepare para anular sus fortalezas. Es marca de la casa del portugués, anular al rival para pescar en aguas turbias, estrategia que no dejó demasiado buen sabor de boca en los tres años que dirigió a los blancos y que sólo él halaga ante parroquias aburridas de escuchar el mismo sermón. 

Cristiano Ronaldo

La gran novedad en la convocatoria del Real Madrid es la presencia de Cristiano Ronaldo. El portugués no estará en el once, aunque Zidane amenazó con eso de que si ha viajado es que está “para jugar”. A lo sumo podría tener algunos minutos o incluso podría quedarse en la grada. Sería lo lógico después de solo tres entrenamientos. La decisión será solo del jugador: banquillo o grada. Da lo mismo lo que piense el francés. Su presencia sí es un recurso de Zidane para hacer grupo y empujar a sus compañeros. Que el vestuario entienda que lo sucedido por tierras americanas fue una puesta a punto para afrontar finales como la de hoy. Partidos que todos quieren jugar. Porque las dudas en el juego son una realidad y llegan ante un rival que no les va a regalar nada. 

Los equipos Zidane no hará experimentos y apostará por los mismos con los que ganó en Cardiff a la Juventus. La única novedad será la presencia de Bale, por entonces salido de una lesión, por Cristiano. El galés pasará el enésimo examen tras otra pretemporada insulsa y de desconexión con el equipo y con el juego. No hay sitio para los nuevos, incluso para Asensio, al que su afición empieza a reclamar en el once antes que al galés.

Mourinho conoce la filosofía madridista, aunque se empeñó en imponer un sello diferente. Fiel a su estilo minimizará las fortalezas madridistas antes que potenciar su propia personalidad. Personalidad que basa en eso, en fastidiar la creación contraria para crecer a costa de ella ya sea por despliegue físico, táctico o recurriendo al lado oscuro del fútbol como último recurso. Llega tocado sin tres hombres importantes de corte destructivo (Jones, Blind y Rojo) y eso le llevará a tomar más precauciones, si cabe, formando una defensa de cinco.