El Real Madrid llega crecido pero corto de gol al Clásico

Marca un 12% de goles menos que antes del parón de selecciones, cinco goles en cuatro partidos tras 92 disparos

Benzema ha perdido la precisión con su peor racha sin marcar desde el 2020, acumula 390’ en blanco

Benzema celebra un gol junto a Vinicius y Militao

Benzema celebra un gol junto a Vinicius y Militao / AFP

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

El Real Madrid llega seguro de sí mismo al Clásico, pero más por las dudas azulgranas que por las propias. Los de Ancelotti también aparecen muy justitos de estadísticas desde el regreso del parón de selecciones. Ha empatado dos de los cuatro partidos ganando por la mínima los otros dos. El motivo principal es que ha perdido efectividad en ataque pese a que sigue produciendo ocasiones ante las porterías rivales.

El equipo blanco ha marcado cinco goles en cuatro partidos y ha encajado tres. Datos que dejan al descubierto ciertas dudas en sus delanteros, que no culminan lo que fabrica. En 360 minutos han disparado en 92 ocasiones a puerta, uno cada casi cuatro minutos, que supone un acierto del 5,4% de sus intentos. Hasta el parón, la puntería subía al 17,3%, con 25 goles en 144 disparos. Un bajón realizador que se traslada al terreno de juego con dos empates muy sufridos contra Osasuna en Liga y el Shakhtar en la Champions. También salvó por la mínima su visita a Getafe (0-1) y el primer envite ante los ucranianos, con un triunfo trabajado (2-1).

BENZEMA TUERCE SU CAMINO

Los problemas físicos de Benzema están afectando al ataque blanco. El francés estuvo un mes sin jugar y le está costando más de lo esperado recuperar la efectividad y su fútbol. Ha jugado tres de los últimos cuatro partidos sin ver portería. Una racha negativa que empezó el 28 de agosto tras su doblete al Espanyol en Cornellà. Dos goles que dejaban su casillero en cuatro en cuatro partidos dando continuidad a su buenos datos de la temporada pasada. Pero partido y medio después se lesionó y no ha vuelto a ser el mismo. Es su peor racha goleadora desde el 2020.

El francés acumula más de cinco partidos sin marcar, 390 minutos en blanco, que ha frenado la producción goleadora del Madrid. Vinicius, su mejor socio, tomó el relevo y es el máximo goleador del equipo con siete dianas. Pero el brasileño también empieza a sentir en sus piernas la acumulación de partidos (el que más minutos suma de la plantilla) que hace mella en su fútbol. Ha perdido la chispa, es menos preciso y está más distraído. Autor de dos de los últimos cinco goles de su equipo con otro de Rodrygo, y dos de los centrales Militao y Rudiger que han salido al rescate de un ataque corto de gol.