El Real Madrid no desaprovecha los regalos

Francesc J. Gimeno

Francesc J. Gimeno

Ningún equipo que aspira a puntuar en el Santiago Bernabéu puede permitirse el lujo de cometer tantos errores como el Eibar. El Real Madrid, que se mostró plano y sin apenas profundidad durante la mayor parte del partido, no desaprovechó los regalos del equipo vasco. El primero llegó en el minuto 18 con el gol en propia portería de Oliveira al rematar un centro de Marco Asensio. El segundo hay que contabilizárselo al meta Dmitrovic, que pudo haber hecho mucho más para rechazar el remate de volea de Marco Asensio (28’), y a la defensa visitante, que dejó que el centrocampista mallorquín rematara sin ninguna oposición dentro del área.

El Eibar fue mejor que el Real Madrid en juego, ambición y actitud, pero le penalizó su bisoñez en el área rival y sus graves lagunas en la propia. Así resulta imposible aspirar a puntuar. El equipo de José Luis Mendilibar pecó de inocencia, porque dispuso de varias opciones muy claras para sorprender al Real Madrid, pero sus jugadores siempre eligieron la peor opción. Inui y Charles, por ejemplo, estuvieron muy poco acertados en este apartado. El conjunto armero pudo adelantarse, por ejemplo, en un remate de volea de Jordán (5’) que paró Casilla.

El Real Madrid pudo haberlo hecho en el 2’, en un primer despiste defensivo del Eibar que Isco no fue capaz de aprovechar, ya que su remate tras una buena asistencia de Asensio fue rechazado por Dmitrovic. Pese a que Zinedine Zidane apostó por los jugones (Isco, Marco Asensio y Ceballos), apenas creó situaciones de peligro. No se vio un aluvión de juego, en contra de lo esperado, hasta el punto de que Cristiano Ronaldo pasó completamente desapercibido durante los primeros 45 minutos.

desacertados

Los blancos no atraviesan un gran momento. Todo lo contrario. Ni siquieran dieron un paso adelante tras el descanso y se limitaron a jugar con el freno de mano puesto. Incluso desaprovecharon dos ocasiones clarísimas para sentenciar el resultado. En la primera (48’), Dmitrovic volvió a rechazar un disparo de Isco a bocajarro y en la segunda (66’) el meta del Eibar volvió a ganar a Cristiano en un mano a mano para desesperación del portugués.

El Eibar siguió a lo suyo, tratando de recortar distancias sin lograr crear situaciones claras de peligro frente a Kiko Casilla. Tampoco le acompañó la suerte en los momentos clave, ya que el colegiado no señaló un claro penalti de Casemiro a Inui en el 55’ que podía haber metido de nuevo al Eibar en el partido, además de alimentar los nervios en las filas locales.

El equipo blanco sólo despertó de su letargo en el tramo final, cuando una conexión entre Theo, Benzema y Marcelo concluyó con un remate raso y cruzado del brasileño que significó el 3-0 definitivo.