Final dramática entre favoritos

El Real Madrid viene viviendo en el alambre en la Champions League desde que ganó la ‘Decimotercera’ en Kiev hace dos temporadas. Cayó con más pena que gloria en los octavos de las dos últimas ediciones (Ajax y City) y puede asomarse al precipicio en la fase de grupos si pierde esta noche en Milan ante el Inter. El problema es que los italianos están más necesitados que ellos. Y todo, porque ninguno ha hecho sus deberes ante el Shakhtar y el Monchengladbach, y ocupan los dos últimos puestos de la tabla.

Ventajas del Inter Son tres puntos clave que provocan angustia en los italianos, la misma de la que quieren huir los españoles. Perder sería un drama para los dos, pero más para los ‘nerazzurri’, que tienen dos puntos menos con tres partidos por jugar. El Inter tiene a su favor que juega en casa, aunque sin público, donde no ha perdido nunca contra el Real Madrid en los siete partidos que han disputado en competiciones europeas. A esto se suma que Antonio Conte cuenta con a todos sus titulares, incluida la pareja ofensiva letal formada por Lautaro y Lukaku, uno de los ataques más potentes de Europa. Brozovic, el motor del equipo es duda, junto a Kolarov, Padelli, Pinamonti y Sensi. Datos positivos que favorecen sus necesidades por mucho que desprecie las importantes ausencias que tiene el Real Madrid. Se pone la tirita -o la escayola- antes de la herida.

El plan de Villarreal

El panorama de Zidane es diferente. Le faltan tres titulares fijos Ramos, Valverde y Benzema, además de los relevos del central y del delantero, Militao y Jovic, más Odriozola. Seis ausencias, tres importantes, que amortigua con el regreso de Casemiro. La incógnita es si el brasileño está para jugar después de 16 días confinado por el coronavirus. Se espera que el francés siga el plan que utilizó en Villarreal en defensa, con Nacho por Ramos y en ataque, con Hazard y Mariano por Benzema. A partir de aquí tendrá que elegir cuatro jugadores entre Casemiro, Kroos, Modric, Odegaard y Asensio para crear y contener la contingencia ofensiva italiana. Este sería el plan de ruta que seguirá en principio, porque ya se sabe que Zidane es un espíritu libre y a veces hace piruetas en el aire arriesgándose a no caer de pie.

Un punto a favor de los blancos es que esta temporada da la cara en los partidos importantes. Lo hizo ante el Barcelona cuando venía de dos derrotas horribles frente al Cádiz y el Shakhtar; y lo hizo contra el Inter, cuando se jugaba media clasificación tras perder con los ucranianos y empatar en Alemania. Una derrota ante los interistas le hubiese dejado moribundo, pero se levantó.

También el Inter llega reforzado y sacando pecho por su remontada el fin de semana ante el Torino en la Serie A. Perdía 0-2 a 25 minutos del final, y arrasó a los turineses para ganar 4-2 con Lautaro y Lukaku de matadores. El belga no jugó en Madrid y va a ser una auténtica pesadilla para Nacho y Varane con el argentino con la escopeta cargada para disparar en cuanto pueda.