Mbappé condiciona el proyecto del Real Madrid

La obsesión de Florentino Pérez por fichar al delantero del PSG está debilitando a un equipo que no ilusiona a sus seguidores

Lleva dos años sin gastarse un euro en refuerzos y sobrevive con los restos de la vieja guardia cada vez con menos representantes

Mbappé se niega a hablar del PSG

Mbappé no quiere escuchar hablar del PSG hasta que no termine la Eurocopa / Perform

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

El fichaje de Kylian Mbappé frena el proyecto del Real Madrid para la temporada que comienza. El club madrileño lleva dos años sin gastarse un euro en refuerzos, lo que debilita el potencial de una plantilla que ha dejado de ilusionar al madridismo. La obsesión de Florentino Pérez por fichar al francés no le deja ver el bosque y si no llega este verano el madridismo vivirá otro año de sufrimiento. La consigna es “tranquilos”, convencidos de que acabará fichado. Pero el Madrid se descompone y sobrevive con los restos de la vieja guardia. Un equipo estancado y con sus recursos económicos reservados para fichar al astro francés.

Un proyecto que no seduce a nadie. Es más de lo mismo. Cimentado en los rescoldos del tricampeón de Champions. Las salidas de Zidane, Ramos y Varane debilitan el potencial y se suma a la de Cristiano Ronaldo. No hay relevos que afiancen sus liderazgos. A ello se suma el bajón futbolístico de dos fijos como Marcelo e Isco, más la desidia competitiva de Bale, del que ya no se espera nada. Carvajal tampoco levanta cabeza con constantes lesiones que le alejan del terreno de juego más tiempo del deseado, mientras que los años no pasan en balde para Modric, Kroos o Benzema, los auténticos pilares del equipo que necesitan más descansos de los que tienen por no tener relevos reales.

ANCELOTTI INTENTARÁ LO QUE NO CONSIGUIÓ ZIDANE

Los fichajes que llegaron desde que se fue Cristiano (2018) no responden, y la política de traer jóvenes promesas no funciona. Florentino se ha empeñado en formar jugadores cuando al Real Madrid lo han sujetado siempre futbolistas contrastados. Y todo se refleja en el campo, con una producción futbolística insuficiente y una alarmante falta de pegada que ha supuesto marcar un gol menos por partido en las tres últimos temporadas.

Una dinámica que empieza a cansar a una parroquia que no puede dar salida a sus quejas por el cierre del estadio por la pandemia. Sin Zidane, Florentino ha recurrido a otro entrenador ‘amable’ para intentar reactivar a un equipo que ni Zizou reanimó. Carlo Ancelotti tiene peores mimbres que los de su antecesor y puede pagar la política de ahorro de su presidente si no gana ningún título. Pero Carletto encaja perfectamente en los planes de un presiden que hace y deshace a su antojo sin que nadie le tosa.