El Madrid necesitó poco más que Benzema para asaltar San Mamés

El Real Madrid vivirá unas dulces vacaciones de Navidad después de asaltar el siempre pétreo estadio de San Mamés y consolidarse como líder en solitario de la Liga Santander. El conjunto blanco tumbó al Athletic Club en un emocionante partido que se decidió por el domino de las áreas merengue. Y porque Karim Benzema, autor de un doblete, no permitió que nadie discutiera el liderato de su equipo, que ahora ya tiene ocho puntos más que el Sevilla, segundo clasificado, con una jornada más disputada.

Athletic Club-Real Madrid, 22/12/2021

Liga Santander

ATH

1

2

RMA

Alineaciones

Athletic Club
Agirrezabala; De Marcos, Nuñez, Yeray, Balenziaga (Lekue, 62'); Zarraga (Nico Williams, 56'), Vencedor, Dani García, Muniain (Nico Serrano, 84'); Sancet (Raúl García, 62'), Iñaki Williams.

Real Madrid
Courtois; Lucas Vázquez, Militao, Nacho, Mendy; Camavinga, Valverde, Kroos; Hazard (Peter Federico, 86'), Benzema (Jovic, 90'), Vinicius (Mariano, 85').

Goles

0-1, Benzema (4'); 0-2, Benzema (7'); 1-2, Sancet (10').

Árbitro

César Soto Grado (riojano). Tarjetas amarillas: Vencedor (42'), Dani García (61') / Vinicius (42'), Camavinga (62').

Incidencias

Partido correspondiente a la jornada 21 de la Liga Santander, disputado en el estadio de San Mamés ante 42.722 espectadores. Compromiso adelantado por la Supercopa de España, en la que tomarán parte ambos equipos junto a Atlético de Madrid y FC Barcelona entre el 12 y el 16 de enero de 2022.

Carlo Ancelotti salió con lo que tenía. Las once bajas entre positivos de coronavirus, lesionados y el sancionado Casemiro no le concedieron abundantes opciones para confeccionar el once titular. Aún así, el equipo blanco presentó una alineación competitiva en La Catedral y agradeció sobremanera los dos zarpazos con los que Benzema decidió empezar el encuentro. El francés calmó a los feroces leones en los instantes iniciales primero con un disparo mágico, con una ‘delicatessen’, con uno de esos tiros con efecto que parecía que solo existían en el videojuego FIFA, y después con una gran definición en una acción que no fue invalidada por fuera de juego porque Unai Núñez tocó el esférico antes de que llegara a sus pies. Karim, que acabó la noche ovacionado, penalizó con crueldad la atrevida propuesta del Athletic de Marcelino, que dejó demasiados espacios a su rival. El conjunto bilbaíno, sin embargo, hizo gala de su resiliencia y se levantó cuando parecía que sería incapaz de hacerlo. En el minuto 10, Sancet recogió un balón y espetó un chut potentísimo que superó a Courtois, recortó distancias y esperanzó a la afición local.

El tanto dio paso a un frenético, trepidante y divertido intercambio de golpes en el que los locales contaron con varias acciones para empatar. El remate de cabeza de Núñez, el intento con la zurda de Vencedor y la volea lejana de Balenziaga no encontraron portería. La presión y la intensidad vasca creció y el Madrid tuvo que saber sufrir. Con un afinado Camavinga en las recuperaciones, un Hazard con buenas ideas (aunque el belga no estuvo acertado en un pase de la muerte a Benzema) y un Vinicius errático y apagado, los visitantes también crearon algo de peligro, aunque no fueron capaces de combinar, generar superioridades y desequilibrar por dentro.

Sufrimiento blanco

Tras el más que merecido descanso, Athletic y Madrid se permitieron unos minutos de tanteo. El ritmo de juego disminuyó y las ocasiones brillaron por su ausencia en el primer cuarto de hora de la segunda mitad. Fue una pequeña tregua en medio de una intensa batalla que se retomó después de un grave error de Lucas Vázquez que estuvo a punto de pagar muy caro el elenco merengue. Sancet habilitó a Iñaki Williams y el delantero, tenaz como pocos, acarició el gol. El balón rozó el palo derecho de la portería de un Courtois que en San Mamés vio truncada su racha de imbatibilidad de 538 minutos sin encajar. Necesitó poco el feudo rojiblanco para volver a convertirse en una olla a presión. A los futbolistas de Ancelotti no les quedó otra que apretar los dientes y aguantar el chaparrón.

El asedio del Athletic no se tradujo en muchas ocasiones. Los locales solo contabilizaron un disparo desviado de Raúl García, un centro venenoso de Nico Williams al que Iñaki no llegó por poco y un chut del pequeño de los dos hermanos que Courtois tapó sin apuros. Aunque el Madrid se olvidó de atacar en algunos momentos, al final tuvo algunas oportunidades para sentenciar el duelo. Julen Agirrezabala, el enésimo extraordinario guardameta formado en las categorías inferiores rojiblancas, frustró los potentes disparos de Hazard, el debutante Peter Federico y Kroos. El marcador no se movió y el conjunto merengue se llevó tres puntos muy importantes para ser aún más líder de la competición doméstica.