El Madrid se abona al 'Baby Boom'

Brahim fue presentado con el Real Madrid

Brahim Díaz fue presentado como nuevo jugador del Real Madrid. El mediapunta aseguró que se cumplía un sueño / ATLAS

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

Sin hacer mucho ruido, pero con una clara tendencia al ‘alza’ los últimos tiempos, el Real Madrid ha consolidado una manera de fichar peculiar y ‘controvertida’ que ha tenido en esta temporada 2018/2019 su eclosión definitiva, por decirlo de alguna manera. La incorporación de Brahim Díaz procedente del Manchester City ha sido el último ejemplo de este ‘Baby Boom’ que hace unas temporadas comenzó el club blanco y que se ha ido asentando hasta montar una auténtica ‘guardería’, por así decirlo. Podríamos decir que todo comenzó el verano de 2011.

VARANE, EL PRIMERO

Rapphaël Varane fue el precursor. El central, con apenas 18 años, se convertía en nuevo futbolista del Real Madrid previo pago de 10 millones de euros al Lens. Por primera vez, la entidad apostaba por una joven promesa desconocida para la gran mayoría y que nadie sabía qué techo podía tener. El defensa abrió la veda y los veranos siguientes otros le seguirían, siendo la tendencia claramente alza con el paso de las temporadas.

ODEGAARD, EL GRAN FIASCO

El siguiente ‘imberbe’ sonado que aterrizaría en la Casa Blanca sería Martin Odegaard. Llegó a bombo y platillo desde su Noruega natal, avalado por los múltiples ‘highlights’ que lo encumbraban como el futuro Leo Messi, pero precisamente esos vídeos le acabaron pesando demasiado. Fichó con apenas 16 años y actualmente, con 20 y tras múltiples cesiones, se encuentra totalmente estancado y sin ningún futuro en la entidad blanca, con la que acaba contrato este próximo mes de junio. Ese verano llegaría también con 21 años Lucas Silva, procedente del Cruzeiro a cambio de 13 millones de euros. Sin incidencia.

ASENSIO DA ALAS

La campaña 2015/2016 fue el turno de Marco Asensio y de Jesús Vallejo. El primero es sin duda el mayor éxito de esta apuesta por los adolescentes del Real Madrid. El club blanco pagó 3,5 millones de euros al Mallorca y lo cierto es que su precio por lo menos se ha multiplicado por 20. Vallejo, por su lado, no se ha asentado en el eje de la zaga y ni Zidane, ni Lopetegui ni ahora Solari han confiado en él, que costó cinco ‘kilos’. En la 2016/2017 llegó Fede Valverde. El uruguayo se incorporó a la plantilla del Real Madrid Castilla y el club ingresó a Peñarol de Montevideo cinco millones. Aterrizó con 17 años y parece que ahora, tres años después de su llegada, comienza a contar de verdad para el primer equipo.

La 2017/2018 trajo bajo el brazo a dos nuevos futbolistas jóvenes sin consagrar, pero con muy buena pinta. Por un lado, Théo Hernández había estado cedido en el Alavés por el Atlético de Madrid. El Real se la ‘jugó’ a su eterno rival y pagó la cláusula de un Théo que tuvo la última palabra. Cedido a la Real Sociedad tras una primera campaña mediocre, parece difícil que se consolide. Por otro lado, Dani Ceballos. El andaluz tenía una pinta magnífica en el Betis, pero no tuvo nada de protagonismo con Zidane en su debut. Cambió radicalmente el panorama a principios de este curso con Lopetegui, pero parece que Solari lo ha devuelto un poco al segundo plano.

LA EXPLOSIÓN

Ha sido la presente campaña cuando la política ha llegado a su máximo esplendor.  En verano, Vinicius Júnior (18 años, 61 millones de euros), Odriozola (22, 30 ‘kilos’) y Lunin (19, 8,5 millones) y ahora en el mercado invernal Brahim Díaz (19 y 17,3 ‘kilos’). Así a bote pronto, el brasileño comienza a apuntar muy buenas maneras y con los demás hay que esperar para el veredicto.