Keylor Navas sigue cantando

Keylor Navas, portero del Real Madrid, empieza a poner de los nervios a los seguidores de su equipo. Su inseguridad en las salidas y nulidad para atrapar el balón abren interrogantes en cada jugada. A eso se suma la cantada habitual de cada partido, como volvió a regalar al Bayer en el Allianz de Múnich facilitando el gol de Kimmich por no tapar su palo en un centro desde la derecha. Un error de bulto que se suma al que cometió en otro partido grande como fue ante la Juventus.

"¿El partido de Keylor? Todo sale de él. Es un error de todos. Al principio de la jugada no estamos bien colocados y luego es una consecuencia de errores. No es sólo de Keylor", justificó Zidane al final del encuentro. Keylor sigue sin la confianza que le afianzó en la portería en temporadas pasadas. Ante el Bayern fe recriminado por algunos compañeros en acciones puntuales en la primera parte, especialmente por largo cuando le pedían que lo hiciera en corto y no rifase balones aéreos en los que tenían ventaja los alemanes.

DESQUICIÓ A SUS COMPAÑEROS

Su inseguridad en las salidas también desquició a sus compañeros, y es que no leyó bien algunas jugadas al margen de otra en la que despejó de puños cuando tenía toda la ventaja para atajar la pelota que llevó al enfado de Ramos. Afortunadamente para su equipo cumplió en la segunda parte, en especial a un disparo peligroso de Ribery que rechazó sin apenas tener visión.

Pese a todo, Zidane no le mandará al banquillo como ha hecho con otros, como Bale o Benzema en los últimos partidos, porque sería su sentencia pese a que Kiko Casilla está capacitado para tomarle el relevo. El canterano no juega desde el pasado 21 de febrero, cuando fue titular en Leganés donde su equipo ganó 1-3. El momento de dudas por el que atraviesa el tico es un argumento válido para que el club mantenga su idea de fichar a otro portero este verano, objetivo al que Zidane no se opone como sí hizo en el mercado invernal con Kepa.