Jovic la vuelve a liar en Serbia por el coronavirus

Jovic trajo de cabeza al Chelsea con este golazo

 El serbio fue el primero en golpear en la ida de las semifinales ante el Chelsea con un testarazo / MEDIAPRO

Sport.es

Luka Jovic, delantero del Real Madrid, sigue abonado a la polémica: si primero incumplió la normativa española al viajar de Madrid a Serbia pese a la cuarentena, ahora se ha visto envuelto en una agria controversia con uno de los grandes mitos del fútbol, Dejan Stankovic, actual entrenador del Estrella Roja.

Stankovic había adquirido respiradores y material médico para la Sanidad de Serbia: ese día, (el pasado viernes) Jovic concedió su única entrevista tras su retorno a Belgrado y preguntado por si estaba dispuesto a ayudar a Serbia, Jovic respondió que sí, pero dejó entrever que él prefería hacerlo sin los focos apuntándole, no como otras personalidades.

Sus palabras se interpretaron como un ataque a Stankovic en una controversia que ha ido creciendo en la prensa serbia hasta provocar que el propio Jovic tuviera que aclarar sus palabras a través de su perfil oficial de Instagram.

"Por supuesto que ayudaré, he ayudado antes y no voy a dejar de hacerlo ahora. El hecho de que no publique cuándo, a quién o cómo ayudo no significa que no lo haga. Me parece que las personas más solidarias no son las que ayudan a los demás bajo los focos y cuando todos están mirando", dijo a 'Objektiv'.

"Míster, espero que sepa que no me refería a usted, ni a nadie en concreto. Respeto y valoro su trabajo y todo lo que ha conseguido en la vida. Me alegro de que todavía haya gente como usted, que están preparados para ayudar a nuestra gente en este momento tan difícil", escribió el delantero del Real Madrid al tiempo que adjuntaba un fragmento de una información del diario 'Blic', el más leído en Serbia, en la que se hacía referencia al asunto.

Stankovic, por su parte, no ha alimentado la polémica y se ha limitado a pedir a la gente que cumplan las órdenes de permanecer en sus casas. Su mujer Ana y su hijo Filip residen en Milán, zona cero de la epidemia en toda Europa.