Hazard, Bale y Jovic, 340 millones en el banquillo

Ancelotti veta a un tridente que sería titular en muchos equipos grandes ni cuando tiene a Benzema lesionado y Vinicius exhausto

El italiano confía en un grupo de 15 jugadores y descarta a 10 a los que ni en la Copa los prueba para sumarlos a la causa

Hazard, Jovic y Lunin habituales del banquillo de Ancelotti

Hazard, Jovic y Lunin habituales del banquillo de Ancelotti / Valentin Enrich

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Dicen que el dinero no da la felicidad, pero ayuda. Pues Ancelotti no quiere que al Real Madrid le ayude y deja 340 millones en el banquillo con tres delanteros que formarían un tridente temible en cualquier equipo grande que los tuviese. Nadie ha cuestionado al italiano cuando ha prescindido de Hazard, Jovic y Bale con Benzema y Vinicius divirtiéndose rompiendo defensas rivales por su frescura, aunque sí ha extrañado su cerrajón por Asensio y Rodrygo como tercer acompañante teniendo al belga y al serbio como opciones.

Ancelotti llegaba a la ‘final’ de Bilbao sin Benzema y con un Vinicius pasado de rosca tras jugar dos partidos con su selección en menos de seis días y volver a jugar 45 horas después del último para repetir con su equipo. A esto sumaba más de 23.500 kilómetros de viaje en un Madrid-Quito-Belo Horizonte-Madrid-Bilbao que deja ‘jet-lag’ en el cuerpo por mucho que tengas 21 años. No había mejor momento para poner a Hazard, Jovic y Bale, o a dos o simplemente a uno en un torneo en el que los técnicos dan oportunidades a los suplentes para sumarlos a la causa en una temporada exigente como la que tienen los blancos.

ASENSIO Y RODRYGO NO DAN LA TALLA

Pero Ancelotti debe llevar muy interiorizado la cruz que les ha puesto para no utilizarlos en el momento que más los necesitaba. Decidió jugar en San Mamés sin delantero centro y repetir su ecuación de Asensio y Rodrygo, que siguen sin dar la talla pese a su empeño de ponerlos siempre. El italiano se ha empeñado de demostrar que el dinero no da la felicidad y prescindir de los 277 millones que se gastó Florentino Pérez, un billete detrás de otro, para ficharlos y los 65 millones que le cuesta tenerlos en la plantilla con sueldos millonarios. Un total 340 millones desaprovechados en el banquillo y, lo peor, que ni se digna a probar no vaya a ser que jueguen bien y le rompa los esquemas de confiar siempre en los mismos.

El italiano confía en un grupo de jugadores y ha descartado a los demás por mucho de que se le llene la boca de que necesita a todos y de que no deje de disculparse con los que no juegan como ha hecho con Isco, Ceballos, Hazard, Jovic, Vallejo, Marcelo, Mariano, Lunin o Camavinga, porque con Bale no ha tenido todavía la oportunidad por sus constantes lesiones. Diez jugadores en el armario que cualquier equipo querría tener en sus plantillas, pero que al italiano no le sirven en el Real Madrid. Lo evidente es que ha vetado a Hazard, Jovic y Bale y el club los ha puesto en el mercado, pero si siguen sin jugar los venderá a la baja si es que llegan ofertas.