Florentino Pérez, solo y aislado en el fichaje de Neymar

El fichaje de Neymar Jr. se ha convertido en una obsesión personal de Florentino Pérez. Por mucho que Zinédine Zidane, el núcleo duro del vestuario y la afición (en su gran mayoría) se opongan a la incorporación del ahora 10 del PSG, el presidente del Madrid hace oídos sordos y  piensa ir hasta el final, luchando contra viento y marea, para hacerse con los servicios de un futbolista único en el mercado, porque reúne el perfil de ‘Galáctico’ que tanto le entusiasma.

Florentino se ha quedado solo y aislado, solo secundado por su fiel director general, José Ángel Sánchez, y por el intermediario israelí, Pini Zahavi, en el pulso que la ha echado al Barça para contratar a Neymar.

La situación roza el esperpento. De hecho, a día de hoy, el mandamás madridista no ha conseguido ni la preferencia del gran protagonista de este culebrón, el crack brasileño, que prefiere volver al Camp Nou donde le esperan con los brazos abiertos sus excompañeros y el barcelonismo.

Ni Zidane, ni ninguno de los pesos pesados del vestuario blanco – con excepción de Marcelo, su compatriota y amigo en la Seleçao – han entrado en contacto con Ney para recomendarle que se olvide del Barcelona y que llegue cuanto antes al Bernabéu. Esta no es la mejor recepción posible para un futbolista, que, desde su aterrizaje en París, dos años atrás, ha tenido constantes atritos con sus compañeros, desde Cavani a Mbappé.

Y a Ney, y a su entorno familiar, tampoco se le escapa, que el madridismo no está mostrando el mínimo entusiasmo en su hipotético aterrizaje al club blanco. Es más, ya sea en las redes sociales, o en las encuestas realizadas por diferentes medios de comunicación de la capital, los aficionados merengues se están expresando contundentemente contra la contratación de un futbolista con pasado blaugrana.

El hecho que Ney priorice al Barça, aunque el Madrid le esté haciendo una oferta económica muy superior, toca la autoestima de la hinchada blanca, que ve que, en realidad es un segundo plato. El madridismo, muy preocupado por una pretemporada decepcionante, preferiría, así como su entrenador, la contratación de Paul Pogbá, que ha hecho todo lo que estaba en sus manos para dejar el Manchester United y vestirse de merengue.

El silencio de Zidane con Neymar es un reflejo de su monumental cabreo por la no-contratación de su compatriota Pogbá. La frialdad del núcleo duro del vestuario y el enfado de la hinchada merengue no es precisamente el mejor escenario para un Neymar, que es muy consciente que, tras su etapa ruinosa (desde el punto de vista deportivo) en París, no puede equivocarse de nuevo a la hora de elegir el destino para los próximos años. Ir a Madrid supone un riesgo, que no tiene Barcelona.

Delante de todo este escenario, los más lógico es que Florentino arrojara la toalla. El orgullo, sin embargo, le puede más a un dirigente, que, como SPORT desveló, está incluso dispuesto a sacrificar a Vinicius Jr., a quien ha ofrecido al PSG. Tanto Leonardo Araújo, director deportivo del campeón francés, como la cúpula qatarí de la entidad saben del aislamiento de Florentino, por lo que están intentado acelerar la operación. 

El mandamás madridista ha respondido buscando la financiación necesaria para afrontar la operación, a través de un crédito firmado con una entidad bancaria española, como SPORT informaba ayer jueves. Florentino, sin embargo,  aún no cuenta con el ‘sí quiero’ de Neymar.

El barcelonismo y el vestuario blaugrana lo esperan

Neymar se está mostrando inamovible en su deseo de volver al Camp Nou. Y este está siendo el elemento que le ha permitido encarar la segunda quincena de agosto con opciones reales de recalar al club donde ha sido más feliz, con el permiso de Santos FC.

El escenario que le espera en Barcelona es antagónico al de Madrid. Los movimientos que está realizando el club, con la secretaría técnica a la cabeza, para contratarlo están de acorde a la voluntad de los diferentes estamentos de la entidad. Ernesto Valverde hizo el papel que le tocaba en la previa del debut liguero, pero ya ha expresado internamente su posición favorable al fichaje del brasileño.

Las vacas sagradas del vestuario, con quien ya coincidió en su primera etapa, están esperando con ansiedad a Ney, conscientes de su potencial, que puede ayudar al Barça a volver a ser un equipo temible en Europa.

Hay ilusión en el barcelonismo por recuperar un futbolista que tuvo un papel protagonista en la última conquista de la Champions, en 2015, y que, así como ocurrió la primera vez que estuvo en el Camp Nou, llegará con hambre de títulos y ganas de reivindicarse como un heredero legítimo a substituir a Leo Messi como el mejor de planeta.