La falta de gol desorienta a Zidane

La falta de gol tiene a Zinedine Zidane desorientado y preocupado de cara a la semifinal de la Champions League ante el Chelsea. El Real Madrid encadena tres partidos sin ver puerta, contra el Getafe y el Betis, en LaLiga Santander, y el Liverpool, en la vuelta de los cuartos de final de la Champions League, y depende del olfato de Karim Benzema que, con 27 dianas, está a tan solo cinco de igualar el mejor registro de su carrera, los 32 tantos que firmó el curso 2011-2012.

Con 76 goles en 45 partidos oficiales estamos ante el Real Madrid menos goleador de lo que llevamos de siglo XXI. Y aún gracias de las paradas salvadoras de Thibaut Courtios y del estado de gracia de Benzema. El francés suma nueve tantos más que todos sus compañeros de vanguardia juntos. Vinicius y Asensio llevan seis; Hazard, tres; Rodrygo, dos y Mariano, uno para un total de 18.

El Madrid sufre sin los goles de Benzema

Si Benzema no marca el Real Madrid sufre. Y la prueba es que el equipo de Zidane solo ha ganado seis de los 17 partidos en los que el francés no ha visto puerta. O dicho de otra manera, en 11 de los 15 partidos que el Real Madrid Benzema no marcó. Y uno de ellos, contra el Alavés (1-2), no lo jugó por lesión.

Valencia (4-1) y Atlético (1-1), en LaLiga Santander, y Athletic (1-2) en las semifinales de la Supercopa, son los únicos partidos que el conjunto blanco no ha ganado cuando el francés ha marcado. Y en el Wanda Metropolitano, su gol en el descuento fue providencial para evitar el KO y mantener vivas las opciones en el campeonato doméstico.

El panorama no invita al optimismo, más ante un Chelsea que si por algo se distingue es por su solidez defensiva. El conjunto londinense solo ha encajado 36 goles en los 50 partidos oficiales, lo que supone una media de 0,72 que en Champions League desciende hasta un 0,3.

Y es que en la máxima competición europea, el equipo que dirige Thomas Tuchel solo ha encajado goles contra el Rennes (1-2) y el Krasnodar (1-1), en la fase de grupos, y ante el Oporto (0-1) en la vuelta de los cuartos de final, una derrota intrascendente.