Estupor madridista por Hernández Hernández

Que Alejandro José Hernández Hernández es un árbitro que no quieren ver ni en pintura en el Real Madrid es de dominio público. Por eso, en el club y en el vestuario blanco han recibido con estupor que haya sido designado para pitar el derbi. Hay malestar general por ser el elegido cuando creen que llueve sobre mojado. Le consideran el Iturralde González de la nueva generación. El ex árbitro vasco reconoció tras su retirada su antipatía por el equipo blanco y que ahora intenta disfrazar como analista en algunos medios.

El madridismo considera que el canario sigue sus pasos y no lo quieren en sus partidos. Creen que el Atlético empieza con ventaja con este árbitro y que es producto de las quejas de Gil Marín, que hace unos días señaló a Velasco Carballo por poner de ejemplo un codazo de Lemar en el partido ante el Villarreal que pudo ser roja: “Son comentarios públicos muy peligrosos, porque condicionan las decisiones de los colegiados”. Y en el Madrid consideran que mandándoles a Hernández Hernández eso no ocurrirá, en todo caso al contrario.

ANTECEDENTES QUE PROVOCAN LOS LLOROS

Los recelos anteceden a los lloros pero la versión madridista se queja de que su estilo desquicia a los jugadores a los que va minando con pequeñas decisiones que consideran injustas. Además, le reprochan un trato chulesco y desafiante Este año le ha arbitrado dos veces, y en las dos los indignó con sus pequeñas cosas que descentran a los futbolistas. En Villarreal (1-1: 2 amarillas por 14 faltas y 1 al Villarreal por 16) y Vitoria (1-4: 3 amarillas por 7 faltas y 5 al Alavés por 17 faltas) los blancos salieron creyendo que habían salvado los partidos más por el canario que por los rivales.

Hernández Hernández ha pitado al Madrid en 24 ocasiones con un balance de 14 victorias para los blancos, cuatro empates y seis derrotas. Además, ha expulsado a cuatro madridistas y ha pitado cinco penaltis en su contra. No se olvidan de sus polémicas en los Clásicos en el que los blancos se consideran perjudicados. En su retina tienen varios penaltis sin pitar y su trato déspota hacia Sergio Ramos, y ahora vuelven a cruzarse con él en un derbi en el que se juegan sus posibilidades en la Liga.